Los refugiados rohinyás en Bangladesh podrían morir por falta de comida, alojamiento y agua, dado que están huyendo de la violencia en Myanmar en grandes números, dijo el domingo la ONG Save the Children, mientras las autoridades empezaron a trasladarlos a campamentos para organizar la distribución de ayuda.

Casi 410.000 miembros de la minoría musulmana rohinyás han huido del estado Rakhine en el oeste de Myanmar a Bangladesh para escapar de la ofensiva militar que Naciones Unidas ha calificado como «ejemplo de libro de limpieza étnica».

«Muchos llegan hambrientos, exhaustos, sin comida ni agua» dijo Mark Pierce, director de Save the Children en Bangladesh en un comunicado.

Niños rohinyás reciben ayuda en un campamento de refugiados de Bangladesh. REUTERS/Danish Siddiqui
Niños rohinyás reciben ayuda en un campamento de refugiados de Bangladesh. REUTERS/Danish Siddiqui

«Me preocupa particularmente que la demanda de comida, alojamiento, agua e higiene básica no se cubra debido al abrupta subida del número de personas necesitadas. Si las familias no pueden cubrir sus necesidades básicas, el sufrimiento empeorará y podrían perderse vidas».

Banglasesh durante décadas ha recibido flujos de rohinyás que huyen de la persecución en Myanmar, un país de mayoría budista donde los rohinyás son considerados inmigrantes ilegales.

Bangladesh ya acogía a 400.000 rohinyás antes de que estallara la última crisis el 25 de agosto, cuando insurgentes rohinyás atacaron puestos policiales y un campamento militar en el estado de Rakhine, matando a decenas de personas.

Pierce dijo que había que aumentar rápidamente la escala de la respuesta humanitaria. «Sólo puede hacerse si la comunidad internacional incrementa la financiación», agregó.

Grupos de derechos y rohinyás que han huido dicen que las fuerzas de seguridad de Myanmar y vigilantes budistas en Rakhine respondieron a los ataques insurgentes con lo que califican como una campaña de violencia y incendios provocados con el objetivo de expulsar a la población musulmana.

Myanmar lo rechaza, diciendo que las fuerzas de seguridad están realizando operaciones de limpieza contra insurgentes del Ejército de Salvación Arakan Rohinyá, que se atribuyó la responsabilidad por los atentados de agosto.

F/publico.es
F/Reuters