Legado de Armando Reverón “aun se escucha en las olas de Macuto”, afirmó Jefe de Estado

El legado inmenso de obras  del pintor Armando Reverón, así como la particularidad de su vida, son testimonios que aun se escuchan en las olas de Macuto, donde construyó el castillete en el cual dio vuelo a su genialidad, afirmó este lunes el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, al conmemorar el 63 aniversario de la partida física de uno de los artistas plásticos venezolanos más importantes del siglo XX.

En su cuenta en la red social Facebook, destacó el legado de este grande hombre conocido como el maestro de La Guaira, “un día como hoy en 1954, partió a la eternidad el maestro de la Luz, Armando Reverón, uno de los más grandes artistas plásticos de nuestra patria”.

Expresó que “Reverón fue un destacado pintor, que supo plasmar en el lienzo, la hermosura de la luz y los contrastes de cada cosa que veía en la naturaleza, en los objetos, en su amada Juanita y en las muñecas que le servían de modelos, dejándonos un legado inmenso de obras, así como la particularidad de su vida, cuyo testimonio aun se escucha en las olas de Macuto, donde construyó el castillete en el cual dio vuelo a su genialidad”.

El Jefe de Estado publicó que desde el año pasado, sus restos mortales descansan en el Panteón Nacional, porque Armando Reverón significó la libertad del pensamiento, de la creación y del valor de las cosas más sencillas cuando son llevadas al arte para el pueblo.

Fue precursor del arte conceptual. Su vida se dividió en varias etapas: La azul (1920), influenciada por el pintor Nicolás Ferdinandov. La blanca (1924), en la que exploró los efectos de la luz. El crítico e intelectual venezolano Alfredo Boulton fue quien le colocó este nombre a esta etapa de la pintura del artista.

La sepia (1940), en la que dedica sus trazos a reflejar el litoral y el puerto de La Guaira y en donde los tonos marrones del soporte del coleto, constituye el valor cromático dominante de la composición, señala la historia.

Posteriormente, pasó a la etapa figurativa en la que utilizó elementos fantásticos y construyó muñecas y objetos para refugiarse en un universo mágico luego de sufrir una crisis psicótica que obligó a su reclusión en el sanatorio San Jorge.

F/VTVcanal8
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