Programa José Vicente Hoy|Loyo: Justa distribución de la tierra es un acto que históricamente exigía su cumplimiento

La Revolución Bolivariana ha logrado una justa redistribución de la tierra, lo cual, era una deuda histórica, ya que la llamada  reforma agraria que instauraron gobiernos de la IV República, sólo benefició al latifundio.

Así lo señaló el ministro del Poder Popular para la Agricultura y Tierras, Juan Carlos Loyo, al ser entrevistado en el programa José Vicente Hoy, que transmite Televen.

Detalló que el censo agrícola hecho en 1998 mostraba que unos 30 millones de hectáreas estaban en manos de 450 mil productores, pero 0,49% de esos productores acumulaba un tercio de las tierras, es decir, cerca de 1.200 latifundios terminaban concentrando cerca de 9 millones de hectáreas.

Para el ministro, es un concepto erróneo la especie que afirma que el gran latifundista es el Estado, “ya que en cualquier legislación del mundo el Estado tiene competencia sobre el tema”.

Mencionó que siete años después de iniciada la llamada reforma agraria, de tiempos de la IV República, y la afectación de predios por parte del antiguo Instituto Agrario Nacional (IAN) se hizo un estudio en el Senado de la República acerca del impacto de esa política y se determinó que había sido un fracaso.

“Se había afectado las peores tierras y se instauró el latifundio en las zonas emblemáticas”, enfatizó.

En todo caso, el tema de la tenencia de la tierra siempre ha generado conflictos y polémicas a través de la historia.

Refirió que la primera gran traición al tema de la redistribución lo más justa posible de la tierra data de tiempos de Simón Bolívar.

Recordó que el Libertador desarrolló una legislación que establecía la distribución de terrenos para soldados que lucharon en la guerra de Independencia, así como para los campesinos.

No obstante, al morir Bolívar la ley de haberes militares se transformó y terminó siendo el primer gran instrumento de usufructo, mediante lo cual se entregaron tierras y así José Antonio Páez y otros generales le adquirieron los predios a los campesinos. En el caso del citado personaje terminó acumulando hasta un millón de hectáreas.

En el actual proceso de revolución, el tema de la tierra ha provocado muchas polémicas y reacciones de grupos de derecha y de grandes latifundistas en contra de la nueva ley de tierras e incluso más de 250 dirigentes agrarios han sido asesinados a través de acciones de sicariato.

DOS MODELOS EN CONTRASTES

Loyo precisó las diferencias fundamentales entre esa reforma agraria de tiempos de la IV República y el actual proceso revolucionario en cuanto a la distribución de las tierras.

Especificó que en el primer caso privó un modelo en el cual la agricultura tuvo como base una injusta distribución de los predios.

De acuerdo con el Banco Mundial, la peor distribución de la tenencia de la tierra la tenían para 1997 Venezuela y Brasil.

El ministro apuntó como segundo componente del modelo de la IV República que no había un apoyo integral al campesino venezolano y el éxodo campesino creció a las ciudades en búsqueda de mejor calidad de vida, además que no existía una política integral para el campo venezolano.

En contraste, durante la Revolución Bolivariana se ha ido conformando un modelo de socialismo agrario, que establece la justa distribución de la tierra para quien la produce o trabaja, sin la existencia del latifundio, así como se han ido conformando políticas públicas en apoyo al productor, en cuanto a financiamiento a tiempo, maquinaria a tiempo, servicio de cosecha y postcoseha y atención de sus condiciones sociales, recalcó.

ATENCIÓN AL SUR DEL LAGO

Durante la entrevista el Ministro también se refirió a la segunda etapa de reconstrucción de la zona Sur del Lago de Maracaibo, donde se invertirán 450 millones de bolívares fuertes en vialidad agrícola, reparación de puentes, tanquilla, viviendas, escuelas y sobre todo en el desarrollo agroproductivo.

“La idea que tenemos es establecer en esa región el ordenamiento justo y equitativo agroproductivo”, puntualizó.

Loyo recordó que en diciembre pasado visitó la Guajira junto con el presidente de la República, Hugo Chávez Frías, a fin de constatar, en un principio, los daños producidos por las lluvias de finales de año.

Se determinó que las principales poblaciones afectadas fueron la del Chivo, el puerto de Santa Rosa, Santa Bárbara y San Carlos, así como el pueblo de Santa Cruz que se inundaron porque estaban rodeados de grandes latifundios que impedían el fluir de las aguas.

Cuando presentamos el balance al jefe de Estado él mismo se dio cuenta de que no podíamos ir a una reconstrucción de la zona Sur del Lago si no se tocaba el problema de la desigualdad de distribución de los fundos”, explicó.

A partir de allí se inició el plan de reconstrucción de la zona en una primera etapa con la recuperación de las tierras.

Loyo indicó que la población de Santa Bárbara sólo puede crecer vía hacia El Vigía, porque son los terrenos más altos, “y cuando comenzamos a tomar medidas se ubicaron todas con la finalidad de revisar esa poligonal, por lo que visitamos cada uno de los más de 20 fundos del sector que inicialmente se les levantó la medida de expropiación, porque verificamos que la persona que lo tenía quería incorporarse a los planes estipulados de producción”.

Fueron 47 fundos y se levantó la medida a unos 20, cerca de 2.400 hectáreas junto con otros fundos medianos, lo cual se determinó a través de la constatación que hicieron las autoridades del Estado.

Fuente/AVN
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