Luis Piña: “Estudiar es entender más lo aprendido empíricamente”

Este joven estudia desde hace cinco años en la Escuela José Ángel Lamas

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Luis Piña es un joven venezolano que desde adolescente se centró en el mundo de la música. Aunque tiene talento natural para el canto y la composición, decidió estudiar formalmente para ser un artista más completo.

Está en la Escuela José Ángel Lamas en Caracas desde hace cinco años. Aprendió teoría, solfeo, cuatro y piano; y este año está sumergido en la percusión.

Actualmente también se desempeña como tecladista, cuatrista y guitarrista y es productor musical hasta que la pandemia del Covid- 19 paró casi todas las actividades a nivel mundial.

Sin embargo, este ejecutante del género urbano decidió mantenerse en contacto con varios conciertos online. El próximo será este domingo 21, Día del Padre, y se titula Evolución en casa, que estará desde las dos de la tarde por su canal de YouTube Luis Piña Music. Este cantautor entonará su temas promocionales “Baila conmigo”, “No sé ni su nombre”, “Vicio”, “No hizo falta” y “Vete”, además de otras sorpresas: “Está hecho con mucho amor y cariño para que juntos disfrutemos este importante”.

-En tu estilo urbano, ¿cuáles son los géneros que más trabajas?

-Siempre me ha gustado inventar. Desde muy niño he sentido la necesidad de crear cosas a partir de lo que conozco. Mi música está llena de fusiones porque estudio todo lo que escucho para usar los elementos que más me gustan en mis producciones y composiciones. Así como los seres humanos en la vida, los compositores y productores a lo largo de su carrera pasan por distintas etapas. En este momento podría decir que uso muchos elementos del reguetón, el R&B, la salsa, el reggae, el trap, el dancehall y la balada. No negaré que ha sido un reto poder lograr un buen resultado. Al principio pasaba muchas horas trabajando para conseguirlo, pero poco a poco se fue haciendo más fácil.

-Hasta tienes un disco…

-Sí. Mi álbum Evolución está lleno de estas fusiones. Personalmente me encanta la variedad que contiene sin perder el sonido que me caracteriza, incluso se ha vuelto común que las personas me pregunten cuál es el nombre del género que hago porque no logran identificarlo. Daré un pequeño ejemplo de algo que me guste usar en cada área de mi trabajo: en la mayoría de mis producciones un recurso característico son los pianos eléctricos, casi siempre uso el Rhodes Mark V, me encanta su sonido, tiene una vibra soul/R&B/funk que me gusta mucho. Al componer melodías para la voz uso mucho notas de corta duración, porque me genera más espacio a la hora de escribir la letra e incluso siento que es más dinámico. Al cantar combino también varias técnicas vocales algunas son el vocal fry, el twang, el singjaying y no puedo negar que soy fan de hacer melismas/riff&runs. ¡Ja, ja, ja!

-Estás en la Escuela José Ángel Lamas desde hace años. ¿Los estudios formales de música en que te ayudan?

-Sí, claro que sí. Debo confesar que no quería estudiar en un conservatorio, pero Mariangelic, que es una de mis hermanas mayores, estudiaba piano en la Lamas y me animó a audicionar para la escuela, gracias a eso pude ser capaz de entender con más profundidad muchas cosas que había aprendido empíricamente, aprender muchas otras y seguir sumando recursos para mi carrera. Aún sigo estudiando en la Lamas a pesar de que las condiciones no son las mejores, ya que nuestra sede está sumamente deteriorada y no es apta para su funcionamiento. Es muy triste que la primera escuela de música del país se encuentre en tan mal estado desde hace tantos años, pero gracias al personal docente, administrativo y obrero hemos resuelto como se ha podido.

-Tocas cuatro y piano. Ahora aprendes percusión. ¿Esa diversidad te ayuda a la hora de los arreglos?

-Por supuesto, pienso que el arreglista debe conocer un poco de cada instrumento para poder conocer sus ventajas y limitantes, no vaya a ser que escriba algo intocable (risas). En mi caso también me ayuda para abaratar costos a la hora de realizar alguna producción, citando un video que subí hace poco a mi Instagram llamado Mi proceso. Las carencias te hacen autosuficiente, aprendí a hacer lo que no pude cubrir con otros medios.

-También eres cantautor. ¿En qué te inspiras a la hora de escribir?

-Creo que la inspiración en todos los seres humanos nace de una explosión de emociones y aparece sin ningún tipo de esfuerzo o voluntad. Si soy sincero, no me gusta depender de ella, es hermosa, sí, cuando aparece. La solución que encontré para no esperar a que llegue la musa en algún momento fue ejercitar el músculo que utilizo para escribir: el cerebro.

-Produces para ti y otros intérpretes. ¿No te satura tanto esfuerzo?

-Todos los seres vivos tenemos límites, aunque me he entrenado para que los míos en la música sean altos. Cuando llego al tope, tomo algo de tiempo para descansar, renovar mis energías, pensamientos e ideas. Siempre es bueno el descanso porque al retomar obtengo una perspectiva más fresca. He aprendido que seguir cuando ya estás cansado puede ser una pérdida de tiempo, me ha pasado que al día siguiente reproduzco lo que hice, no me gusta y termino haciéndolo de nuevo.

T/ Eduardo Chapellín
F/ Cortesía LP
Caracas