El actual presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, ganó con el 79,7% de los votos a favor los actuales comicios presidenciales en el país, seguido de Svetlana Tijanóvskaya, con un 6,8%, según muestran los datos de las entrevistas al pie de las urnas, anunciados en un programa en directo del canal Bielorrusia-24.
En tercer lugar aparece la candidata Ana Kanopátskaya, con un 2,3%; en cuarto, Andréi Dmitriev, con un 1,1%; mientras el líder del partido socialdemócrata Gramada, Serguéi Chérechen, obtiene un 0,9% y el quinto lugar entre los pretendientes.
Se asegura además que el 9,2% de los votantes eligieron la opción en contra de todos.
El senador ruso Alexéi Kondrátiev, que estuvo presente durante los comicios en calidad de observador, aseguró que el éxito de Lukasheno era de esperar, ya que la gente elige la estabilidad y la seguridad en el país.
«Las urnas se han cerrado, todo está tranquilo. No hemos registrado ningún tipo de violaciones que puedan afectar el resultado de la votación», dijo el diputado.
Kondrátiev considera que, para la mayoría de los ciudadanos de Bielorrusia, «Lukashenko es una persona que puede proteger el país de los cataclismos, de las revoluciones de colores, del impacto de Occidente».La participación ciudadana en el momento del cierre de los colegios electorales fue del 84,05%.
La oposición llamó a los habitantes de a pie de Minsk a volver a los colegios electorales para «controlar el recuento de los votos».
Tras ejercer el voto, Lukashenko reconoció que las autoridades de Bielorrusia se preparan para «toda clase de opciones», pero descartó que la votación del 9 de agosto dé origen a un grave conflicto interno.
«No podemos subestimar la situación, pero no hay absolutamente ningún motivo para afirmar que el país se vea sumido mañana en el caos, en un conflicto o en una guerra civil», subrayó.
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