Macedonia anunció este miércoles oficialmente el cierre total de su frontera con Grecia tras dos días de estar sellada sin permitir el paso a ningún refugiado.
El ministro del Interior macedonio aseguró que ningún migrante ha cruzado hacia su país desde el martes, mientras la agencia MIA relató que no se ha recibido a ninguna persona en el centro de acogida de Gevgelija en las últimas 50 horas.
Esta decisión llega después de que Eslovenia, Croacia y Serbia comenzaran hoy a aplicar restricciones fronterizas para restaurar la normativa Schengen, lo que supone el cierre efectivo de la ruta de los Balcanes para los refugiados.
Grecia registra ya en su territorio unos 36.000 refugiados atrapados por las restricciones a la entrada que ya impuso Macedonia en los últimos meses, al vetar el paso a todos los que considera migrantes económicos y prohibir el paso a afganos y finalmente a todos los sirios e iraquíes que no procedieran de zonas de combate.
Mientras que en Serbia no ha entrado ningún refugiado desde la vecina Macedonia en las últimas 48 horas, según lo informado por la televisión pública serbia RTS.
En la frontera entre Macedonia y Serbia no hay ya refugiados y en el centro de acogida de Presevo tampoco se ha registrado ningún nuevo refugiado desde hace dos días, indicó la emisora.
Desde el pasado otoño, los refugiados llegados desde Turquía a las costas griegas seguían su viaje por Macedonia, Serbia, Croacia y Eslovenia hasta Austria, Alemania y otros países del norte de Europa.