Cipriano Martínez ha representado a la ciudad de Caracas desde diferentes formatos y desde distintas percepciones. En su trayectoria como artista plástico se ha planteado aprehender el movimiento de la ciudad en su obra y retratar las intersecciones donde su orden se quebranta dando lugar al caos.
Con casi 20 años de investigación y producción pictórica, Cipriano Martínez presenta su más reciente trabajo en la Galería Beatriz Gil en Las Mercedes, Caracas, titulado Máculas ortogonales. Esta muestra ofrecerá al público un conjunto de obras, en las que aquella indagación centrada en el movimiento urbano se disipa en aras de un tratamiento más enfocado en la estructura en sí misma, mediante de la representación de retículas.
Las retículas, elementos fundamentales de la obra pictórica de Martínez, son las estructuras ordenadoras del espacio. Estas conviven en la obra con pequeños accidentes o errores que transgreden su intento de organizar y componer en una forma estable y geométricamente perfecta el espacio vacío.
La individual, que será inaugurada el próximo domingo, se inserta dentro de las corrientes abtraccionistas y geométricas. La curaduría estuvo a cargo de la investigadora Lorena González.
“El origen de todo esto es la dicotomía entre orden y caos. Por ello la curadora y yo decidimos titular la muestra Mácula Ortogonales, precisamente para develar esa contradicción entre lo impecable de la estructura y los accidentes que se van acumulando en el proceso”, dijo el artista plástico que actualmente reside en Londres.
El término mácula se refiere en este contexto a un defecto de impresión en la imagen. En este sentido, se incorporan máculas dentro de una composición ortogonal que a primera vista pareciera impenetrable, pero que es desarticulada por el accidente en la composición.
LA CIUDAD COMO CENTRO DE INDAGACIÓN
Todo el trabajo plástico de Martínez ha tenido como centro de indagación la ciudad y su movimiento, así como las distintas percepciones sobre ella. Sin embargo, en esta reciente propuesta Martínez ha cambiado el tratamiento plástico y conceptual, sin abandonar la reflexión de lo urbano.
“La ciudad cambia permanentemente y también cambia la percepción de ella. Ya yo no vivo aquí, no soy actor viviente de esta ciudad pero soy espectador de algo que también forma parte de mí. Sin embargo, las distancias se van acortando por las posibilidades técnicas que ofrece la tecnología. Ha cambiado la forma en la que yo me aproximo a la ciudad, es decir, la ciudad es vista a través de dispositivos electrónicos, a través de la pantalla de un computador”, manifestó el artista.
La exploración que Cipriano Martínez ha realizado de la ciudad a través de una pantalla dio como resultado esta nueva propuesta pictórica. “La referencia de la ciudad va quedando en segundo plano, porque en el proceso de observación a través de una pantalla pasan muchas otras cosas que interrumpen y distraen. Eso está reflejado en las obras. Me voy quedando con la estructura del ordenador porque hay una coincidencia muy estrecha entre las retículas con las que se realizan los planteamientos originales de las ciudades (planos) y la estructura intrínseca de la pantalla de un ordenador”, dijo.
LO ARTESANAL Y LO TECNOLÓGICO
Las imágenes de Mácula Ortogonal remiten a un imaginario digital e informático. La paleta de colores y las formas de las obras manejan los códigos de las nuevas tecnologías. No obstante, estas imágenes son precisamente representadas a través de un método tan tradicional y milenario: el óleo sobre tela.
“La naturaleza de las imágenes remiten un poco al paisaje digital, a la repetición, a la retícula cartesiana que empieza a interrumpirse. Toda esa naturaleza tecnológica y esos referentes de los tiempos que estamos viviendo están aquí (en las obras) siendo pintadas con una técnica tradicional como el óleo”, señaló el artista, quien confesó las motivaciones por las que prefiere el uso de esta técnica.
“Yo prefiero apostar por lo caótico del óleo. Cuando trabajas con óleo nunca sabes cómo va a secar, el óleo tiene tiempos de secado muy lentos. Me gustan eso, me gustan los accidentes que ocurren con el óleo. Me interesa plantear eso en mi trabajo. Apostar por la pintura como se ha pintado desde hace siglos, pero hablando de imágenes que corresponden a nuestro tiempo”, explicó.
DIFERENTES FORMATOS
Al contrario de sus anteriores exposiciones con obras de grandes formatos, Máculas Ortogonales está formada por una variedad de formatos de diferentes tamaños. “No toda pintura requiere un gran formato y no todo gran formato garantiza una mejor pintura. Cada imagen responde a un formato en particular. La elección del mismo te lo da la experiencia, el ensayo y el error. Aquí hay pinturas en pequeño formato que previamente fueron concebidas en gran escala y otras que pasaron por un proceso a la inversa”, explicó Martínez.