El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, aprobó este jueves 700 millones de bolívares y 22 millones de dólares a la planta Kimberly Clark para garantizar la producción hasta el 31 de diciembre a través del Fondo de Desarrollo Nacional (Fonden).
“He venido a probar los recursos, hacer las inversiones y garantizar la materia prima para que esta empresa se levante y sea un ejemplo”, dijo el jefe de Estado señalando que el Gobierno Nacional realizó un estudio financiero y económico tras el saboteo que sufrió la planta al ser cerrada por sus dueños.
En este sentido, en transmisión conjunta de radio y televisión manifestó que aprobó los dos primeros meses del presupuesto en bolívares por un monto de 700 millones “para la inversión de la caja de funcionamiento de esta empresa recuperada por la clase obrera y 22 millones de dólares”.
Maduro indicó que estos recursos servirán para realizar el pago de nómina, a contratistas y los diversos servicios que necesite la maquinaria y la planta, al tiempo que apuntó que los recursos serán retornables, ya que la empresa devolverá el dinero para las grandes misiones sociales. “Así como se los doy, así me lo devuelven”, apuntó.
Para garantizar la estabilidad de la planta, el primer Mandatario Nacional nombró a José Gregorio Hernández como autoridad única de la fábrica, con el acompañamiento de Eglé Sánchez de la Central Bolivariana Socialista de Trabajadores y del jefe de la Región Estratégica de Defensa Integral (Redi) Central, M/G Jesús Suárez Chourio.
Maduro destacó que el principal reto que tiene Hernández es «resolver todo el sistema de distribución» de los productos producidos en la empresa.
“Lo ideal sería que ustedes tengan su flota moderna de camiones y esos camiones salgan a los Llanos, Oriente, Caracas y esos camiones tengan sus GPS” a fin de evitar el contrabando de los productos, propuso Maduro «pero mientras llega ese punto» instruyó establecer los mecanismos para que «no se pierda ni un pañal y vaya a las manos de los bachaqueros sino que vaya a las manos de las familia».
El Mandatario instruyó a los trabajadores a hacer un tratamiento especial a la planta para que tome fuerza, vaya creciendo, eleve su producción al 100% y sea un ejemplo de expansión para toda Venezuela.
El tiempo del capitalismo debe quedar atrás para abrirle la puerta a un nuevo tiempo de humanidad, de multiplicación de la riqueza y el socialismo, manifestó por último.