El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, recibió la tarde de este lunes los restos mortales del revolucionario, Fabricio Ojeda, los cuales fueron acompañados por el Poder Popular desde el Cementerio General del Sur, en Caracas.
Este hecho histórico reivindica la lucha emprendida por el periodista, que fue asesinado el 21 de junio de 1966 y se realiza el 23 de enero, fecha importante para el país porque se conmemoran los 59 años del derrocamiento de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez.
Durante el acto se realizaron honores al revolucionario y el segundo comandante de las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional, Rufo «Relámpago» Meneses, hizo entrega del fusil de Ojeda al joven Antonio Galindez, representante de la nueva generación de luchadores, como símbolo de entrega y lucha revolucionaria.
RECONOCIMIENTO POST MORTEM
El mandatario Nacional entregó la Orden Libertadores y Libertadoras de Venezuela en su primera clase Espada post Mortem al guerrillero patriota en reconocimiento al legado y destacada trayectoria en la defensa de los ideales de la Nación.
Al igual que la copia del sable Victorioso de Carabobo, perteneciente al General en Jefe Rafael Urdaneta, el cual fue entregado a la hija del líder revolucionario, Thays Ojeda.
El jefe de Estado estuvo acompañado por la primera combatiente, Cilia Flores, integrantes del Ejecutivo Nacional y representante de los Poderes Públicos.
