El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, reiteró este lunes su rechazo a la alianza que existe entre jerarcas de la iglesia católica con el sector extremista de la oposición, que vienen desarrollando un plan golpista caracterizado por acciones vandálicas y terroristas.
Desde el Palacio Presidencial de Miraflores, en Caracas, donde dirigió una jornada de trabajo, repudió en ese sentido que ese sector de la Iglesia esté de lado de la oligarquía y que actúe en detrimento de las mayorías.
Por ello, llamó a los católicos a la reflexión «contra la farsa y contra la perversión de los cardenales que se prestan para servir al gran capital y que se prestan a atentar contra el pueblo y la paz, y propician la violencia».
El Mandatario nacional lamentó que la Revolución Bolivariana, que desde su mismo surgimiento ha obrado para crear los programas y atender a los más vulnerables y a quienes por décadas fueron sentenciados a la exclusión, sea convertida en blanco de ataque por parte de la jerarquía de la iglesia.
Mencionó que pese a las arremetidas, la Revolución continuará su marcha en función de cumplir con su objetivo: «proteger al que sufre, al que necesita», a través de los programas sociales como las misiones y grandes misiones.
«Ellos se la pasan entre los ricachones, con sus riquezas y conspirando todo el tiempo», repudió y subrayó que pese a que se les ha tendido la mano para trabajar en conjunto en función del bienestar del pueblo, su respuesta ha sido la negativa. «Ellos prefieren irse con los ricos, con los privilegiados».