El reimpulso y desarrollo de una poderosa industria en la rama del transporte, reforzada ahora con el Motor Automotriz, es un objetivo estratégico del Gobierno Nacional y del presidente Maduro, quien ha aprobado recursos y medidas administrativas al respecto. Venezuela tiene capacidad para ensamblar más de 200 mil vehículos anuales. Se ha planteado construir un motor venezolano y hasta fabricar aeronaves
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En marzo de este año el presidente Nicolás Maduro en las instalaciones de la empresa mixta Chery de Venezuela, Corporación Automotriz Z.G.T C.A., ubicada en Las Tejería, estado Aragua, lanzó el Motor Automotriz con el propósito de reimpulsar la producción de vehículos en Venezuela por una industria severamente afectada por la guerra económica y la serie de agresiones de todo tipo dirigidas por el Gobierno estadounidense contra la Revolución Bolivariana. El Motor Automotriz es el número 17 que se suma a la Agenda Económica Bolivariana y se integra a la Gran Misión Transporte.
Desde ese acto en marzo pasado se han producido una serie de iniciativas con anuncios importantes del Presidente y del ministro de Transporte, Hipólito Abreu, que indica la “remotorización”, término utilizado en uno de los actos, del sector en los últimos meses. En las actividades se ha planteado la posibilidad de fabricar un motor venezolano y aviones.
La semana pasada, en el más reciente anuncio presidencial le tocó el turno al sector marítimo y acuático con la lanzada al mar de embarcaciones repotenciadas y hechas en Venezuela con mano de obra calificada criolla.
Durante su recorrido por la planta Chery, empresa con capacidad para armar un vehículo cada seis minutos, Maduro señaló, entre el número de cifras que maneja, que Venezuela tiene una capacidad instalada para ensamblar unos 210 mil vehículos al año, entre carros, buses, autobusetes, camiones. Además, puede producir 1.600.000 motos y 25 mil tractores. La capacidad para producir vehículos puede ser elevada hasta un millón de unidades anuales.
Entre la serie de consideraciones que hizo el Presidente al firmar el decreto del Motor Automotriz, expuso que el ingeniero y ministro del Transporte Hipólito Abreu lo presidirá. El nuevo motor tiene como objetivo la reorganización, el reimpulso, el crecimiento y la operatividad del sector con el fin de generar un nuevo modelo de gestión productivo eficiente y sustentable. Fue firmado el decreto para la creación de un Fondo Social Rotatorio para la compra de 20 millones de euros en el arranque, aprobó beneficios fiscales para la industria automotriz nacional, rubricó un decreto que obligatoria a la incorporación de la producción nacional de todos los sectores industriales de partes y autopartes al sistema del Motor Automotriz. Dijo que en Venezuela hay 104 fábricas automotrices, entre ensambladoras y fabricantes de autopartes: 70 de autopartes, concentradas en los estados Aragua, Miranda, en Caracas, en Carabobo, 34 ensambladoras de vehículos, de las cuales 20 son públicas o mixtas con China, Irán y Bielorrusia. También hay 14 grandes y poderosas industrias privadas.
El Presidente aprobó 7 millones de euros para las obras civiles de ampliación y culminación de la empresa ensambladora y fábrica de autobuses Yutong y anunció que este año se repararán 2 mil unidades y que llegarán otras 2 mil de “paquete” para servir al sistema de transporte masivo.
La semana pasada el ministro Abreu se reunió con el sector empresarial para impulsar el desarrollo del sector automotriz. La actividad contó con la presencia del ministro del Poder Popular de Comercio Nacional, William Contreras, el ministro del Poder Popular para el Proceso Social de Trabajo, Eduardo Piñate, el presidente de Fontur, Urbanista José Chacón y el vicepresidente de Venezuela Productiva, Tcnl. Oscar Dávila Rondón, así como varios representantes del sector empresarial.
Durante el encuentro se debatieron estrategias para avanzar en el proceso de ensamblaje, teniendo como prioridad retomar el mercado de importación, impulsar el sector industrial e incentivar la producción nacional para fortalecer el Motor Automotriz.
Adicionalmente se discutieron aspectos relativos a la necesidad de incorporar la manufactura venezolana de autopartes a la producción de vehículos, la adecuación del sector a las normas internacionales y las licencias para la importación.
Un avión venezolano
El viernes pasado, en el estado La Guaira, el presidente Maduro presidió la salida del ferry Paraguaná I que llevará pasajeros desde La Guaira hasta Nueva Esparta aproximadamente en 8 horas.
El ferry, expusieron Maduro y el ministro Hipólito Abreu, fue reparado con mano de obra exclusivamente venezolana, en sociedad con la empresa privada. Allí se dijo que la “remotorización” de la mencionada embarcación representa un contundente reimpulso de la industria naval venezolana.
Abreu apuntó que en este proceso de repotenciación del Paraguaná I participó en unión cívico-militar el cuerpo de ingenieros navales de Venezuela para apoyar la recuperación de este buque.
“Un trabajo como este jamás se había realizado en Venezuela y se demostró que tenemos a los técnicos y la capacitación suficiente para lograr el reimpulso de la industria naval en nuestro país, un objetivo que nos hemos trazado desde la Gran Misión Transporte Venezuela, en su vértice número 6, que corresponde a todo el encadenamiento productivo para nosotros poder desarrollar la industria automotriz, naval, aeronáutica y la ferroviaria”, mencionó.
En un pase televisivo al estado Sucre, el Presidente presenció la botadura del buque Playa Medina con capacidad para transportar 84 pasajeros en la ruta Cumaná-Güria. La embarcación es la segunda de este tipo y fue construida totalmente en Venezuela. Se informó que en tres meses searán puestos en funcionamiento otros dos navíos para sumar cuatro de los 156 programados.
El presidente Maduro aprobó además un plan de incentivos para el sector acuático que fortalezca la exportación y así hacerle frente al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos.
La aprobación de este plan surge en respuesta a una solicitud realizada por el sector acuático durante un primer encuentro del sector acuático, en el que participaron 270 empresas y 500 expertos en el área acuática.
En estos debates, detalló el ministro para el Transporte, se solicitó al Mandatario Nacional la aprobación de este plan que permitirá «garantizar reducción de tarifas, mejoramiento del sistema de movilización de cargas en los puertos, garantía de que los canales de navegación que tenemos nosotros en nuestro país, sean adecuados a cualquier tipo de carga que pueda llegar y que a su vez los costos asociados sean más eficientes».
De igual forma, se propone la creación de una ventanilla única para los pagos que se realicen por los servicios en la industria naval, así como crear las condiciones para la construcción de nuevas embarcaciones en los astilleros del país, entre ellos «barcos que puedan llevar más de 350 contenedores».
En un reciente encuentro del sector acuático realizado en el Círculo Militar participaron entes públicos y privados ligados al área naval, astilleros con capacidad de producción, consultores navales en las llamadas Olimpiadas del Transporte 2019.
El encuentro se realizó con el objetivo de propiciar espacios de diálogo sobre las políticas públicas y privadas a fin de fortalecer las técnicas para continuar consolidando la Gran Misión Transporte Venezuela.
Allí el ministro del Poder Popular para el Transporte, Hipólito Abreu, manifestó que esta apertura del Primer Encuentro del Sector Acuático Nacional es una iniciativa que se desprende de la Gran Misión Transporte Venezuela, para la planificación de la integración del sistema intermodal a los efectos de desarrollar en el plano educativo y encadenamiento productivo una planificación estratégica del desarrollo del sistema acuático nacional.
Abreu apuntó que este encuentro no solo analiza el desarrollo de la fabricación de barcos, sino también el desarrollo de los sistemas de hidrovías, la estructura legal que se maneja en el sistema acuático del país, así como también lo correspondiente a la gente de mar y la atención integral que estos individuos deben tener.
“Quiero expresar que este evento ha tenido un impacto que ha superado las expectativas. Tenemos presente aquí a más de 300 empresas y más de 500 especialistas del sector acuático nacional en un mismo recinto debatiendo en siete mesas de trabajo para lograr la facilitación portuaria, el desarrollo de la industria naval, el tema de las hidrovías y de derecho marítimo (…), todo esto en el marco de una planificación estratégica que nos ha planteado el Presidente de la República en este nuevo comienzo, donde buscamos recomponer fuerzas”, exteriorizó.
Igualmente, Abreu reveló que próximamente se tendrá un encuentro similar en el sector aéreo y que está sobre la mesa la iniciativa de fabricar aviones en el país. Además, indicó que este ciclo de actividades cerrará con el encuentro del sector ferroviario, para así continuar laborando en pro de la optimización de la mencionada industria en el territorio, todo esto en el marco de las Olimpiadas del Transporte 2019.
“El trabajo que hemos venido desarrollando con la integración de la industria privada y las fuerzas vivas del Gobierno va por buen camino y continuaremos avanzando cada vez con mayor velocidad y eficiencia, elementos fundamentales en este tiempo de guerra económica”, finalizó.
Empujando el tren
En 2017 entró en servicio el transporte de pasajeros por ferrocarril entre Yaritagua, ciudad yaracuyana, y Barquisimeto, capital del estado Lara. Posteriomente, la ruta se extendió hasta Chivacoa. El nuevo servicio ferroviario, cómodo, rápido y barato, hizo levantar esperanzas entre los habitantes de este corredor centro-occidental que hace años era servido por trenes que hacían la ruta Puerto Cabello-Barquisimeto. La unión de estas dos ciudades, incluyendo San Felipe, la capital yaracuyana, se espera que muy pronto sea una realidad.
En junio de este año, el Instituto de Ferrocarriles del Estado (IFE) y los compañeros de Bolivariana de Puertos (Bolipuertos) cerraron el mes con la primera exportación de la circulación comercial de carga pesada desde el terminal intermodal del Puerto Seco Batalla de Araure hasta los muelles marítimos de Puerto Cabello, según una nota de prensa del IFE.
El transporte de veinte contenedores se llevó a cabo desde la zona de puerto seco Batalla de Araure tras acuerdo con la empresa privada Taurel & Cia. k Sucrs., que manifestó su satisfacción luego de haberse realizado el traslado que cumplió a cabalidad los procesos operativos-administrativos eficientes y seguros.
La maniobra forma parte de las actividades realizadas en pro a la inauguración del Puerto Seco, con la que los involucrados buscan reimpulsar el transporte desde la zona primaria por la vía férrea, y aprovechar la capacidad de traslado que ofrece el servicio de ferrocarril y el impacto económico en la región.
Para el cumplimiento de la agenda de exportación se realizó la demostración de carga de contenedores, y el equipo de la gerencia del tramo centro occidental Simón Bolívar realizó la inspección junto a las instituciones Bolivariana de Puertos, el ministro para la Agricultura Productiva y Tierras, Wilmar Castro Soteldo, la Gobernación del estado Portuguesa, el Seniat y el Comando Antidrogas, entre otros.
Gracias a un equipo comprometido con el mantenimiento de la vía férrea se logró trasladar más de 400 toneladas de madera (Teka), con dos locomotoras GP9 y DF8 en veinte plataformas portacontenedores.
Por otro lado, en julio pasado, el presidente Maduro inauguró, mediante un pase televisivo al estado Carabobo, el servicio de transporte ferroviario de pasajeros entre San Diego y Guacara. Este tramo es un ramal de la línea férrea que se viene construyendo entre Puerto Cabello y La Encrucijada, iniciada por el comandante Hugo Chávez, junto al tren Tinaco-Anaco, el tren Chaguaramas-Cabruta y el tren San Juan de los Morros-San Fernando de Apure, obras que se encuentran “en construcción”, según la página web del IFE, pero que fueron paralizadas debido a los ataques económicos que sufre Venezuela por Estados Unidos.