Malí conformará un nuevo gobierno el venidero fin de semana luego del golpe del Estado del pasado mes, prometió este jueves el recién designado primer ministro interino, Modibo Diarra.
En declaraciones a periodistas, apuntó que el nombramiento del nuevo gabinete estará «a la altura de la grave situación» que vive este país africano, donde fueron desmanteladas las instituciones y apresadas personalidades políticas y sociales.
Los militares golpistas detuvieron en los últimos días a figuras vinculadas al depuesto presidente constitucional, Amadou Toumani Touré, en una nueva escalada de detenciones.
Entre los detenidos se encuentran el ex primer ministro Modibo Sidibé, el director general de la Policía, Sadio Gassama, y el candidato presidencial por el partido Unión por la República, Soumaila Cissé.
Los altos funcionarios, apresados en la noche del lunes en sus hogares, fueron trasladados al cuartel militar de Katti, próximo a esta capital y sede principal de los sublevados.
Ante la ola de detenciones el decano del Colegio de Abogados, Issaka Keita, y un grupo de juristas, exigieron la liberación de los detenidos.
Como pasos en busca de la reconciliación nacional, el 12 de abril pasado fue nombrado presidente interino de Malí el titular del Parlamento, Dioncounda Traoré, y cinco días después resultó designado Diarra como primer ministro.
Pese al nombramiento de los altos cargos gubernamentales, la junta militar detenta el poder bajo las órdenes del capitán Amadou Haya Sanogo, aseguraron fuentes en el anonimato.
La semana pasada los golpistas anunciaron respetar el acuerdo alcanzado a principios de mes con la Comunidad de Estados de África Occidental (Cedeao), horas después de la investidura de Traoré como nuevo jefe de Estado.
El arreglo entre militares y el organismo africano establece el retorno al orden constitucional si son levantadas las sanciones políticas, económicas y diplomáticas impuestas por la Cedeao.
También estipula decretar el perdón a los participantes en el levantamiento armado.