La ex primera ministra del Reino Unido Margaret Thatcher pidió a un exmilitar británico que contactara con los que preparaban el golpe contra Hugo Chávez de 2002 en Venezuela, informa ‘The Guardian’.
En unas memorias inéditas, el exoficial del Servicio Aéreo Especial (SAS, por sus siglas en inglés) Simon Mann escribe que la Dama de Hierro, aunque ya estaba retirada de la gran política, intentaba favorecer a un grupo insurgente que pretendía derrocar al entonces presidente de Venezuela Hugo Chávez.
Mann describe un encuentro con la ex primera ministra, en el que ella le preguntó si ya se había reunido con un hombre de apellido Sánchez, de ese grupo insurgente. “No, pero Mark [el hijo de Margaret Thatcher], dice que lo vamos a ver mañana”. Entonces Thatcher dijo: “Espero que eso salga bien también” y añadió que “tenemos que cuidar a nuestros amigos, Simon… como usted seguro que ya sabe”.
El 11 de abril de 2002, en medio de protestas en contra del sistema socialista, Chávez fue expulsado del país y su puesto fue ocupado por Pedro Carmona Estanga, titular del principal gremio empresarial de Venezuela. Sin embargo, su nombramiento fue rechazado por varios países y el 14 de abril el comandante regresó a Venezuela para reasumir la presidencia, un hecho sin precedentes en América Latina.
Los detalles de esas reuniones con Thatcher iban a ser parte del libro de memorias ‘Cry Havoc’ de Mann, publicado en 2011, pero fueron retirados por consejo del editor, John Blake.
Los periodistas del diario ‘The Observer’ han obtenido y revelado el contenido de esas partes inéditas que revelan también que Thatcher tuvo igualmente alguna influencia en el fallido golpe de estado de Guinea Ecuatorial, un país rico en petróleo, en 2004. En esa intentona golpista estuvo implicado también su hijo Mark, quien facilitó fondos para la compra de helicópteros que utilizaron posteriormente los insurgentes.