El discurso Yo tengo un sueño (I Have a Dream) ha trascendido como un arma fundamental en la lucha que Martin Luther King lideró por los derechos civiles de la población afrodescendiente de los Estados Unidos, dijo con motivo de cumplirse hoy, 55 años de esta pieza oratoria, el profesor Reinaldo Bolívar, presidente del Instituto de Investigaciones Estratégicas sobre África y su Diáspora (Centro de Saberes Africanos Americanos y Caribeños) y director principal del Centro Venezolano de Solidaridad y Amistad entre los Pueblos.
El profesor Bolívar subrayó que este pronunciamiento está ubicado en la consolidación de las luchas del movimiento afroestadounidense y de su unidad de acción en los momentos más difíciles para sus integrantes en su propio país.
-En lo emotivo este discurso da herramientas para el optimismo de las luchas del momento y del futuro. En lo legislativo juega un importante papel en la derogatoria de leyes discriminatorias en EEUU y en la aprobación de otras a favor de la igualdad y derechos de los afrodescendientes.
Agregó que, así mismo, el discurso orienta hacia el hecho de que cada acción triunfante es motivo para buscar la próxima victoria. Cada victoria es atacada y por ello debe ser defendida con optimismo.
-Los protagonistas de este momento apostaron por la victoria a través de la unidad nacional y de la solidaridad internacional.
CO: ¿Quién es Luther King?
El presidente del Centro de Saberes Africanos Americanos y Caribeños señaló que Martin Luther King es el principal referente de los luchadores afrodescendientes estadounidenses por los derechos civiles, tanto en su país como en el mundo, y se destacó junto a otros líderes afros por oponerse a la guerra de los Estados Unidos contra Vietnam.
-Luther King, de religión protestante cristiano, encarna la batalla contra violación de los derechos de la población afro al voto, la educación y las libertades básicas.
Se dio a conocer nacionalmente al asumir la defensa de la luchadora afro Rosa Parks quien había desafiado el apartheid de su país al negarse a ceder el asiento en autobús a un joven blanco. Ese hecho originó la protesta en los autobuses públicos de Mongotmery, detalló…
-Pregonaba la unidad entre todos. Si bien el tema del discurso, es bandera de luchadoras y luchadores del mundo, King lo coloca en el centro del debate en Estados Unidos, y con ello contribuyó a motivar importantes cambios en su país, así como a profundizar las interrelaciones entre las luchas y movimientos afro en el mundo, en especial en África, Caribe y Norte América.
CO: ¿Cómo era el momento político en el mundo?
El profesor Reinaldo Bolívar manifestó que internacionalmente, Estados Unidos acababa de salir de la crisis de los cohetes con la URSS, en plena Guerra Fría, que mantenía al mundo dividido entre oeste y este. Parte de esa situación se expresó en el largo conflicto bélico por el cual EEUU quería subyugar a Vietnam.
Internamente la confrontación por el poder y su forma ocasionaría el asesinato de Kennedy, mientras en África continuaban los triunfos de los movimientos de independencia pro socialista cuya consigna era la igualdad de los pueblos -precisó.
Yo tengo un sueño
El entrevistado advirtió que Yo tengo un sueño, ha sido analizado desde varias perspectivas: religiosa, cultural, oratoria, política y en todas ellas queda catalogado como una pieza excepcional explicó el experto en temas sobre África.
-En él, King aborda con magistral sensibilidad el asunto principal de la lucha del mundo en ese momento, como era la igualdad entre todos los seres humanos sean blancos, negros, caucásicos, asiáticos, indígenas.
Destacó que las palabras del líder afro tenían como objetivo denunciar los atropellos y abusos sufridos por los afroamericanos, debido al conflicto racial durante ese siglo de la historia estadounidense.
Pronunciado ante una multitud de más de 200 mil personas, al final de la marcha por el trabajo y la libertad, que tuvo lugar en Washington el 28 de agosto de 1963, figura entre las piezas oratorias más conocidas y valoradas, y tuvo un poder movilizador que se expandió por todo el territorio norteamericano.
Se cumplían cien años del documento de Proclamación de la Independencia, por parte de Abraham Lincoln, para todas y todos los norteamericanos, donde decía que todos los seres humanos son nacidos iguales, más la realidad todavía no lo expresaba.
Vale la pena citar parte de su contenido:
“…cien años después, las personas negras todavía no son libres. Cien años después, la vida de las personas negras sigue todavía tristemente atenazada por los grilletes de la segregación y por las cadenas de la discriminación. Cien años después, las personas negras viven en una isla solitaria de pobreza en medio de un vasto océano de prosperidad material. Cien años después, las personas negras todavía siguen languideciendo en los rincones de la sociedad americana y se sienten como exiliadas en su propia tierra. Así que hemos venido hoy aquí a mostrar unas condiciones vergonzosas”.