Más de cien militares enfrentarán procesos judiciales por cerca de 50 ejecuciones de civiles, que se conocen como “falsos positivos”, realizadas entre 2002 y 2008 en diversos municipios de los departamentos colombianos de Caldas, Quindío y Risaralda, se informó oficialmente.
De acuerdo con la notificación hecha por la Fiscalía de la ciudad de Medellín, capital del departamento de Antioquia (noroeste), los 107 oficiales, suboficiales y soldados del Ejército tendrán que acudir a las audiencias programadas desde finales de abril hasta julio próximo.
La investigación realizada por el ente judicial implicó a los uniformados, actualmente en servicio, en la muerte de campesinos, dirigentes sindicales, recolectores de café y algunos integrantes de grupos ilegales en 53 municipios de esa zona del país, quienes fueron presentados por los militares como criminales “muertos en combate”.
Tras varias investigaciones, la Fiscalía estableció en 2008 que dentro del Ejército operó una red dedicada a buscar jóvenes para llevarlos bajo engaños a lugares donde fueron asesinados y mostrados posteriormente como guerrilleros.
El abogado de las familias de las víctimas, Jorge Molano, dijo que tras recibir la notificación de los procesos discutirá con sus clientes la posibilidad de reclamar ante el Estado una indemnización económica.
Según cifras oficiales, los casos de ejecuciones extrajudiciales conocidas comúnmente en el país como “falsos positivos”, dejaron más de 3.000 víctimas en Colombia y más de 1.622 investigaciones abiertas que involucran a 3.963 miembros de la fuerza pública.
El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, afirmó que las fuerzas militares están dispuestas a colaborar con la justicia para aclarar los hechos “lo más pronto posible”.