Un total de 414 niños y adolescentes en situación de calle, refugiados en casas de abrigo y pacientes hospitalizados son formados y atendidos con programas socioeducativos de la Fundación El Niño Simón, en el estado Monagas.
Roosevelt Martínez, director de programas socioeducativos de la Fundación El Niño Simón en la entidad, destacó que de 3.500 niños que están matriculados en las escuelas y programas de la fundación, 414 son formados con 11 programas alternativos en Casas del Niño, en el Centro de Atención al Niño y al Adolescente y en Casas de Apoyo Socio Infantil como la casa José Tadeo Monagas, María Eva Liscano de Maturín y San Isidro, del municipio Piar.
Los 3.086 niños restantes estudian en 36 centros de educación inicial distribuidos en ocho municipios de la entidad.
«Los formamos con programas académicos de 1º a 6º grado de educación primaria, les impartimos talleres de manualidades, cultura, deportes; mientras que en otros centros sólo trabajamos con programas culturales en horarios vespertinos, con talleres, danza, música, pintura y teatro», detalló.
Indicó que en este tipo de casas de niños atiende a pequeños en situación de calle y a aquellos cuyos padres trabajan todo el día.
«Para mí resulta un beneficio poder dejar a mi hijo, que tiene 10 años, en la casa José Tadeo Monagas, porque trabajo todo el día y así recibe formación cultural, aprende otras actividades y desarrolla habilidades», expresó Carmen Díaz, representante de Luis González, de la Casa del Niño José Tadeo Monagas.
Los hospitales Dr. Manuel Nuñez Tovar, de Maturín; Darío Márquez, del municipio Bolívar, y José Antonio Urrestarazu, de Caripe, atienden a niños y jóvenes que tengan tiempo hospitalizados y que cursan estudios con normalidad.
«A ellos les damos una nivelación mientras están recuperándose para que cuando vuelvan a las escuelas puedan continuar sus cursos con normalidad», agregó Martínez.
El director de los programas destacó que estas herramientas resultan de gran importancia porque sirven de complemento para la educación integral de los jóvenes. «Buscamos medir, explorar y proyectar las habilidades artísticas y recreativas de los niños y adolescentes para formarlos como ciudadanos integrales», expresó Martínez.
Otro programas alternativo es la sala de lectura que funciona en el municipio Piar de la entidad. Los otros municipios en los cuales funcionan estos programas son Caripe, Libertador, Punceres, Zamora, Bolívar, Cedeño y Maturín.