
Son más de 50 niñas, niños y adolescentes los que cada sábado plena las instalaciones del estadio Olímpico de la Universidad Central de Venezuela para aprender sobre el rugby, una disciplina que viene ganando espacio en el país.
Desde las 9:00 am y hasta las 11:00 am las y los participantes ven acción. Los entrenadores los dividen en grupos y van enseñando los aspectos básicos de este deporte que en el país cada día va ganando adeptos.
Los entrenamientos se organizan de acuerdo con la edad; el ejercicio físico es importante, pero también se hace énfasis en lo teórico, el trabajo colectivo y aspectos que podrán en practica durante toda su vida.
Odalis García, organizadora de la Escuela de Rugby de la UCV, explicó que el objetivo era brindar un espacio a los niños y niñas en este deporte y de esta manera ir fortaleciendo las canteras que en un futuro serán las estrellas del rugby nacional.
SEMILLERO
“Tenemos menos de un año trabajando, pero la verdad ha sido muy gratificante ver la forma que el número de echamos va creciendo. Lo único que pedimos es el apoyo de los padres, no se cobra inscripción y tampoco hay una exigencia. Una colaboración 100 bolívares para los aspectos logísticos, solo eso”, dijo García.
Ella está a un lado de la cancha recibiendo y conversando con los representantes. En la cancha, los entrenadores van paso a paso indicando a los atletas lo que deben hacer.
“Quiero aprender y jugar rugby, porque me parece un deporte muy bueno. Mis profesores me tratan muy bien, porque siempre están pendiente de todos. Quiero vestir los colores de mi país”, dijo Rafael Colina, de ocho años.
Colina ya aprendió a dar los tacharles y es uno de los más destacados, pero para él lo que es más importante es compartir con sus compañeros.
TRABAJO CON AMOR
Sus entrenadores, Yeraldine Estanga, Bernardo García y Alejandro Lozada disfrutan dar las clases y dirigir a este grupo que como ellos mismos dicen es a veces complicado de manejar, pero que deja grandes satisfacciones.
“Son niños que disfrutan correr y todo eso, pero hay que enseñarles los valores del rugby, son aspectos que le servirán en el campo de juego, pero también elementos fundamentales que les permitirán hombre y mujeres de bien”, aseguró Estanga.
Ambos entrenadores sonrían y destacan que también disfrutan como niños esas dos horas de entrenamiento, corren y ríen.
“Les explicamos cosas muy importantes. Que sepan que no hay individualismos, que para lograr el éxito se hace trabajo en equipo. Que se esfuercen por las cosas que quieran conseguir y en función de eso lograrán grandes cosas”, afirmó García.
A ENTRENAR
Los entrenadores iban mostrando algunas técnicas. Los pequeños miraban atentos, pero al momento de correr una sonrisa dejaban ver.
Ribero Martín, de seis años, miraba cuidadosamente. Dijo que su sueño es llegar a jugar rugby profesional y formar parte de la selección de Venezuela.
“Lo que más me gusta es hacer deporte, porque juego y puedo correr con mis amigos. Si me gustaría, cuando sea grande, poder jugar y viajar con mi equipo Venezuela”, comentó Martín.
El rugby nacional tiene su semillero y en la UCV comienzan a formarse las futuras estrellas de la disciplina.