Cerca de un millón de campesinos colombianos fueron desplazados de sus lugares de origen a causa de la violencia y el modelo económico imperante en el país, señala el informe de la Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento (Codhes). «Es un fenómeno masivo constante, sistemático que se produce por el incremento de la violencia, asociados a los paramilitares», explicó Jorge Rojas, vocero del organismo.
“Para combatir las bandas delincuenciales que azotan a Medellín, se empleará a un millar de estudiantes universitarios como informantes del Ejército”, informó el presidente colombiano Álvaro Uribe.
“Los universitarios que colaboren con el Ejército recibirán al mes cien mil pesos a título de bonificación», añadió Uribe.
Rafael Pardo, del Partido Liberal, consideró la decisión como una medida desesperada, “y muestra que en Medellín la situación se salió de control”.
Guillermo Baquero, de la Asociación Colombiana de Estudiantes Universitarios, dijo que la medida es una decisión es militarista.
ESTADO COLOMBIANO PIDE PERDÓN
El Estado colombiano pidió perdón en San José por el crimen del ex senador comunista Manuel Cepeda, de la Unión Patriótica, en agosto de 1994, durante las audiencias públicas de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
«El Estado colombiano desea reiterar el reconocimiento internacional en el caso del crimen contra el senador Manuel Cepeda en el marco de esta audiencia y les pide perdón (a los familiares) por los hechos ocurridos», dijo la abogada Margarita Rey, representante del gobierno de Colombia en el litigio.