Pueblo brasileño se movilizó este viernes |Las medidas de Michel Temer que disminuyen derechos laborales

Este viernes el pueblo brasilero se volvió a movilizar en contra de las medidas neoliberales del presidente de facto Michel Temer que atentan contra los derechos laborales y sociales alcanzados en la nación tras años de lucha.

La movilización se llevó a cabo en 15 estados del país y busca reafirmar la batalla unitaria del movimiento sindical en torno a los proyectos de reforma al sistema de pensiones, el PEC 241, la defensa del empleo y de la reducción de la jornada laboral.

Reforma del Sistema de Previsión Social

Aumenta la edad mínima de jubilación a los 65 años e iguala la edad entre hombres y mujeres, y entre trabajadores del campo y la ciudad.

En Brasil, la ley permite que las mujeres puedan jubilarse con 30 años de cotización, y los hombres con 35 años de servicio público.

Congelamiento de los concursos de servidores públicos

Congela por 20 años el presupuesto para la Salud y la Educación. Si es aprobada la Propuesta de Enmienda Constitucional (PEC) no podrán crearse nuevos puestos de trabajo.

De ser aprobado finalmente por el Congreso, el límite de gasto en las áreas de salud y educación entrará en vigor en 2018.

El congelamiento del salario mínimo es el primer paso para asegurar la reforma de la Sanidad, la próxima meta de la gestión de Michel Temer (PMDB) en el Congreso Nacional.

Negociado sobre lo legislado

El Proyecto de Ley 4193 autoriza que los derechos previstos en la Legislación Laboral Brasileña (CLT por sus siglas en portugués) puedan ser negociados entre los trabajadores y los contratantes.

Sin embargo, en la práctica, los beneficios como el 13° salario, las vacaciones, el adicional nocturno, licencia de paternidad y el salario mínimo pueden ser relativizados.

Tercerización (subcontratación)

El Proyecto de Ley de la Cámara (PLC 30/2015) autoriza a las empresas a contratar servicios de terceros hasta para la actividad final que prestan las propias compañías.

Disminuye los costos de contratación pero universaliza los tipos de contratos que se relacionan con las actividades medias, como limpieza y seguridad.

Una universidad podría contratar bajo ese régimen a profesores para que presten servicios de transporte o limpieza.

«Flexibilización» de la jornada de trabajo

Legaliza la contratación temporaria incluso por pocas horas y permite ampliar la jornada de trabajo de 8 horas a 12 horas diarias.

Se mantendrá la jornada promedio de 44 horas semanales de trabajo pero estas horas podrán ser utilizadas en virtud de la necesidad específica de la labor, con un tope de 12 por día.

FyF/Telesur