La líder indígena guatemalteca Rigoberta Menchú asistió este sábado a los actos de celebración del 35º aniversario de la Revolución Sandinista en Nicaragua, donde expresó su rechazo a la masacre que ejecuta el estado de Israel contra el pueblo palestino de la Franja de Gaza, que ha causado más de 300 víctimas.
Más de 30 delegaciones de organizaciones políticas del mundo se encuentran en Nicaragua para asistir a las celebraciones por el aniversario del triunfo de la Revolución. Numerosos mandatarios progresistas de la región han atendido la invitación del presidente Daniel Ortega.
«Hoy no es un 19 de julio solo de alegría y baile, sino también de posicionamiento político y de indignación por países que apoyan a Israel, especialmente, Estados Unidos, que tiene que sancionar a estas naciones que practican el genocidio», declaró la activista en contacto informativo transmitido por venezolana de Televisión.
Menchú comentó que en los encuentros con mandatarios y organizaciones han analizado la coyuntura del mundo actual, especialmente la situación en la Franja de Gaza. En este sentido, reiteró el mensaje de solidaridad profunda de Latinoamérica con el pueblo de Palestina » y la condena enérgica a la actuación de Israel, de los sionistas que quieren exterminar a un pueblo, matando niños, mujeres».
Desde hace 11 días los habitantes de la Franja de Gaza han sido víctima de los bombardeos del régimen de Israel, quienes han emprendido más de 30 ataques bélicos en la zona causando la muerte de más de 300 palestinos.
En cuanto al arribo de los 35 años de la victoria sandinista, Menchú apuntó que es un movimiento convertido en ejemplo para Centroamérica, Latinoamérica y el mundo.
«Lo mas grande es que está revolución está firme, da resultados, la vemos en las calles de Nicaragua y vemos la participación de un liderazgo prometedor», acotó.
El 19 de julio de 1979, el gobierno dictatorial de Anastasio Somoza Debayle, el último de esa familia que ocupó el poder, fue derrocado por un movimiento insurreccional, encabezado por el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN). El régimen somocista encontró su final con la victoria de la Revolución Sandinista, llamada así en honor a Augusto César Sandino.
Menchú, premio Nobel de la Paz, también manifestó sus saludos cordiales al presidente nicaragüense Daniel Ortega y su esposa, Rosario Morillo, «quienes con su fe y trabajo permanente han simbolizado todo lo que los héroes y mártires del sandinismo soñaron y es hacer que la revolución sea popular, de millones de personas, de niños y jóvenes».
«Será siempre Nicaragua una luz en el corazón de la humanidad», indicó Menchú, al tiempo que destacó el legado de Hugo Chávez, «que vino a fortalecer el espíritu de unidad latinoamericana y dar agenda a todas las personalidad progresistas, revolucionarias y a los partidos de izquierda».