Por Jordán Rodríguez|Menos que nada (Opinión)

Nuevamente somos testigos del caradurismo de los sectores que se oponen irracionalmente al Gobierno Revolucionario.

El caso de los videos de Lorent Gómez Saleh demuestra, sin lugar a dudas, la tesis de los altísimos niveles de desesperación que están presentes en la psique de la oposición.

Ver a este muchacho disfrazado de mercenario gringo, portando armamento pesado y hablando de sus nexos y facilidades para comprar explosivos, volar puentes y asesinar líderes “medios y pesados” de la Revolución solo abre nuevas dudas.

¿Además de Álvaro Uribe Vélez, aquellos que vendían a Gómez Saleh como “líder” sacrosanto del movimiento estudiantil como Antonio Ledezma y María Corina Machado, son los dueños de los 50 millones de … que gastó el pequeño terrorista en comprar explosivo plástico C-4?

¿Por qué Carlos Vecchio, un prófugo de la justicia, sale pidiéndole explicaciones a Lorent, como si huyera hacia adelante?

¿Por qué tanto silencio en la MUD, JAVÚ y el resto de organizaciones neonazis y fascistas que tantas veces le levantaron el brazo al niño de la llamada “Operación Libertad?

Da lástima ver cómo siguen utilizando a la juventud como fichas de un juego en el que no hay propuestas, honestidad ni honor.

La ultraderecha latinoamericana encarnada en este caso específico en las figuras del senador Uribe y del expresidente Oscar Arias, premio Nobel de la Paz, nos alertan sobre la inversión que está haciendo la Casa Blanca por derrocar al Gobierno del presidente Nicolás Maduro.

Esto mientras en los medios mis queridos colegas hacen el ridículo tratando de defender lo indefendible y justificando las imágenes y declaraciones de Gómez Saleh como “legítima defensa” ante un Estado de “malandros”…

Definitivamente “son la nada” y lo seguirán siendo por mucho, mucho tiempo.

rodriguezjordan@gmail.com