La infraestructura hotelera del estado Mérida proyecta brindar acogida a un estimado de 180.000 turistas en la Semana Santa 2017, indicador que arroja un crecimiento 3,95% respecto a la afluencia registrada en el mismo período de 2016. La Corporación de Turismo del estado (Cormetur) divulgó sus proyecciones previas a la temporada en una nota de prensa.
«Nos vamos a desplegar en los 23 municipios, donde tendremos a informadores, encuestadores, guardaparques y supervisores», detalló al respecto David Peña, presidente de Cormetur, citado en el texto.
Resaltó que la red hotelera con más de 40.000 plazas cama se encuentra a punto, luego de que el ente adscrito a la gobernación coordinara más de 110 inspecciones a establecimientos prestadores de servicios.
Por otra parte, el Gabinete de Seguridad y Paz de la Gobernación dirige el despliegue de más de 3.000 efectivos de seguridad y prevención, adscritos a Protección Civil, Bomberos, policía estadal y nacional y Fuerza Armada Nacional Bolivariana.
VARIADA OFERTA
El estado Mérida, ubicado en la región andina de Venezuela, es uno de los principales destinos turísticos de montaña en el país y destaca en el contexto caribeño por poseer el sistema funicular más largo, alto y moderno del mundo: el Teleférico Mukumbarí.
La infraestructura de cuatro tramos y cinco estaciones proyecta recibir unas 40.000 visitas a su estación base y trasladar en el recorrido completo a unos 25.000 turistas, confirmados a la fecha, de acuerdo a informes del Ministerio para el Turismo.
Datos aportados por Venezolana de Teleféricos (Ventel) indican que 25.600 personas visitaron la estación base del Teleférico Mukumbarí, sus espacios de recreación y de esparcimiento en el asueto de Carnaval 2017, de las cuales más de 14.000 ascendieron en el funicular a las estaciones de alta montaña.
De acuerdo a Cormetur, la entrada en funcionamiento del nuevo Teleférico ha significado un incremento de 30% en la afluencia general de turismo al estado, que posee diversos atractivos adicionales.
Entre ellos el balneario lacustre de Palmarito, ubicado al norte de Mérida en el municipio Febres Cordero, a unos 173 kilómetros de recorrido por carreteras, entre los municipios Libertador, Campo Elías, Sucre, Alberto Adriani, Obispo Ramos y Caracciolo Parra. También está la laguna Mucubají en el municipio Rangel, el Parque La Mucuy en Santos Marquina, el Monumento Laguna de Urao en Sucre y el Museo de Ciencia y Tecnología en Libertador, entre otros.
PARQUE BEETHOVEN
Por otra parte, el conocido Parque Beethoven de Mérida retorna a su sitial como atractivo predilecto en la oferta turística del estado, ubicado en la región andina de Venezuela, donde por décadas ha figurado entre los más emblemáticos puntos de encuentro junto al Teleférico y al Parque Chorros de Milla.
Sus 6.000 metros cuadrados de área fueron recuperados por la Gobernación de Mérida. María Eugenia Sánchez, estudiante de arquitectura y residente del sector Santa María, dijo que es un “urbanismo en cuyo corazón literal y simbólicamente se encuentra el Parque Beethoven”.
«Es un emblema de Mérida, un hito del turismo y orgullo de todos los vecinos de Santa María», apuntó la joven, sobre el proyecto de recuperación, concebido como sitio de encuentro cultural, para el turismo y para los más de 275.000 habitantes de la capital merideña.
INVERSIÓN SOCIAL
El amplio parque cuenta con dos relojes: el de las flores y el de las melodías de Beethoven, que anuncian a lo largo del día el cambio de hora con la interpretación de ocho fragmentos musicales, originales del célebre compositor, pianista y director de orquesta alemán Ludwing Van Beethoven (1770-1827). Para su repotenciación se invirtieron 88 millones de bolívares y tecnología nacional.
El nuevo proyecto incluye el control electrónico de los mecanismos del conocido reloj de Beethoven y la sincronía a través de sistema de posicionamiento global (GPS por sus siglas en inglés), para la corrección de la hora, en caso de fallas eléctricas.
También suma la instalación de luminarias de diodos emisores de luz (LED por sus siglas en inglés), el rediseño paisajístico, la plantación ornamental, pintura de murales y la construcción de una caseta de vigilancia policial.
El renovado espacio se construyó por primera vez en la década del 70 del siglo pasado, en ocasión del bicentenario del natalicio de Beethoven, cuyo legado cultural se honró nuevamente en Revolución, durante la conmemoración 190 de su inmortalidad.