Las personas que se declararon mestizas en Brasil sumaron 92,1 millones, un 45,3 % de la población, y se convirtieron por primera vez en el mayor grupo étnico-racial superando a los blancos, según el censo de 2022, publicado por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
Además, 88,2 millones de personas se definieron como blancas (43,5 %), 20,6 millones negras (10,2 %), 1,7 millones (0,8 %) indígenas y 850.100 amarillas (0,4 %).
«Desde el censo demográfico de 1991, se perciben cambios en la distribución porcentual por color o raza de la población, con un aumento en las declaraciones por color o raza parda, negra e indígena, y una disminución para la población blanca», explicó Leonardo Athias, analista del IBGE.
Según Athias, los cambios en los porcentajes de las categorías de color o raza tienen una naturaleza multidimensional. «Hay varios factores que explican estas variaciones. Pueden ser demográficos, migratorios, de identificación, condiciones de vida, servicios, entre otros», detalló.
Distribución en el territorio
El censo también muestra el color o categoría racial preponderante para cada municipio de Brasil. En un total de 5.570 municipios, la población parda fue mayoritaria en 3.245 ciudades, los blancos en 2.283, los indígenas en 33 y los amarillos en ninguna.
Otro dato importante es la distribución étnico-racial en el territorio. Los pardos constituyeron la mayoría de la población en el nordeste (59,6 %), en el norte (67,2 %) y en centro-oeste (52,4 %).
Los blancos fueron mayoría en el sur (72,6 %) y también representaron casi la mitad de la población en el sudeste (49,9 %). Las regiones con mayores concentraciones de población negra fueron el nordeste (13 %) y sudeste (10,6 %). Los amarillos estaban más concentrados en el sudeste (0,7 %).
La definición de color o raza en el censo se realiza mediante autodeclaración, es decir, el residente entrevistado se identifica según una de las cinco alternativas: blanco, negro, amarillo, pardo o indígena.