Infantes de Marina y policías brasileños tomaron este domingo el control de dos favelas de esta ciudad, donde proliferan barrios marginales de pobres, en los que operan narcotraficantes y bandas paramilitares.
La operación comenzó en horas de la madrugada en las localidades de Manguinhos y Jacarezinho, y contó con la participación de mil 500 efectivos, infantes de marina y policías militares, destacaron fuentes castrenses, según el canal de Televisión Globo.
Con el apoyo de 24 vehículos blindados y helicópteros, los militares ingresaron a esas localidades, donde se incautaron 10 kilos de pasta base de cocaína y 30 autos robados, así como fueron detenidas 104 personas, incluidos 15 menores de edad, en su mayoría drogadictos, señaló la fuente.
El gobernador de Río de Janeiro, Sergio Cabral, destacó que tras la ocupación militar de esas favelas, comenzará un proceso de pacificación, que incluye obras de infraestructuras y servicios sociales.
Se trata -dijo- de otro paso más para reducir la violencia y ofrecer una vida más pacífica a los ciudadanos.
Cabral señaló que esto es un proceso definitivo y la estrategia de seguridad está dirigida a garantizar la paz en todas las comunidades.
La operación se realizó sin disparos y según la Policía, se debe a un trabajo meticuloso de inteligencia, de localización de escondites de drogas, armas, y detención de delincuentes.
Eduardo Paes, reelecto alcalde esta ciudad, con el mismo nombre del Estado, reconoció que hay personas que viven en esas comunidades en condiciones inhumanas.
Las autoridades del Estado iniciaron en 2008 una operación en las favelas de Río con miras a lograr el control de esos barrios y acabar con las bandas paramilitares y traficantes de drogas que operan desde ellos.
Las fuerzas castrenses mataron la víspera a cinco delincuentes en una acción realizada en los barrios pobres de Manguinhos, Mandela, Varginha y Rocinha, está última la favela más grande de esta urbe.
Según fuentes castrenses, 28 comunidades fueron pacificadas hasta el momento y estos barrios se ubican próximos a las áreas donde transcurrirán los partidos del Mundial de fútbol de 2014 y los Juegos Olímpicos 2016.