Creado en Estados Unidos|Minilaboratorio permite predecir los océanos del futuro

Un minilaboratorio creado por científicos estadounidenses permitirá a los expertos mirar hacia el futuro y recrear los cambios que deberán soportar los océanos debido al cambio climático.

Cerca de un tercio del dióxido de carbono o CO2 emitido por vehículos, fábricas y otras fuentes es absorbido por los océanos. Las concentraciones del principal gas de invernadero en el mar están aumentando al doble del ritmo existente durante más de 800.000 años.

Y las consecuencias son potencialmente devastadoras. El aumento de CO2 altera el pH del océano, volviéndolo más ácido, lo que afecta a su vez la habilidad de los organismos marinos de formar sus esqueletos.

Las crecientes emisiones de dióxido de carbono, procedentes principalmente de la quema de combustibles fósiles, han hecho que la acidificación del océano aumente un 30% en comparación con los niveles preindustriales, provocando que el pH de las aguas superficiales de los océanos haya descendido 0,1 unidades. El pH es una escala logarítmica, por lo que cada variación numérica representa variaciones a gran escala. Un cambio de una unidad de pH significa un incremento de 10 veces.

Estudios anteriores señalan que si el pH se reduce hasta 7,7 los corales serán degradados severamente. Si las emisiones de CO2 siguen creciendo al ritmo actual podría llegarse a un pH de 7,8 a fines de siglo y esto podría significar la destrucción de la gran mayoría de los corales en el mundo. El promedio actual para los océanos del mundo es 8,1.

Otro de los impactos previstos es el aumento de temperatura en el mar, causante de la muerte o blanqueamiento de corales. El aumento de temperatura mata los corales al afectar la relación simbiótica de la que dependen para sobrevivir.

Altos niveles de temperatura hacen que los corales expulsen las pequeñas algas unicelulares que dan color a sus tejidos. Esas algas son las que realizan fotosíntesis y proveen entre un 50 y un 80% del alimento a los corales. La pérdida de las algas, que se conoce como blanqueamiento por la desaparición del color, es algo usualmente mortal para los corales.

Estudios anteriores señalan que los corales empiezan a blanquearse cuando se da un aumento de 1,5 grados centígrados respecto a su temperatura máxima normal. Si el incremento global de temperatura se sitúa entre los 2 y 3 grados centígrados este siglo, la mayoría de los corales del mundo estarán en serio riesgo.

Texto/BBC Mundo