Ministro de Defensa de Colombia renuncia ante polémica por muerte de niños en operativo

El ministro colombiano de Defensa, Guillermo Botero, presentó este miércoles la renuncia a su cargo, luego de que se reveló que durante un bombardeo a un campamento de guerrilleros, ocurrido en agosto pasado en el sur del país, murieron 14 insurgentes y entre ellos habían ocho menores de edad, reclutados por los irregulares.

«El día de hoy en reunión con el señor presidente de la República (Iván Duque) para analizar la actual coyuntura política, se acordó que lo más conveniente era presentar renuncia al cargo de ministro de Defensa nacional», señaló un comunicado firmado por el funcionario.

A su turno, el jefe de Estado tras aceptar la renuncia de Botero designó como ministro encargado de ese despacho al comandante de las Fuerzas Militares, general Luis Fernando Navarro.

«Luego de aceptar renuncia de Guillermo Botero he designado como ministro de Defensa encargado al general Luis Fernando Navarro, actual comandante de las Fuerzas Militares. Nuestro compromiso es continuar velando por la seguridad de los colombianos y combatir cualquier actividad criminal», escribió el jefe de Estado en su cuenta de Twitter.

Botero en el comunicado presentó un pequeño balance de su administración, que duró un año y dos meses, y le deseó los mejores éxitos en materia de seguridad para el mandatario.

Inicialmente, el ministro afirmo que el bombardeo realizado en agosto pasado, cuando fue dado de bajo un líder rebelde de las disidentes de las FARC, en el que murieron 14 personas y entre ellas ocho menores de edad, fue una operación legitima y negó que las autoridades judiciales hayan iniciado investigaciones contra los militares que participaron en esa acción.

«Todas las operaciones militares están precedidas de una fase de planeamiento denominada proceso militar de toma de decisiones. Este proceso está acompañado en todas sus fases por el asesor jurídico operacional, figura que se implementó en todas las Fuerzas Militares desde 2008, por mandato de la Política Integral de Derechos Humanos y DIH del Ministerio de Defensa Nacional. A ese acompañamiento fue al que me referí en la Plenaria del Senado del día de ayer», declaró el funcionario al leer un comunicado.

En la víspera, Botero fue acusado por partidos opositores e independientes de ocultar la muerte de ocho menores en un bombardeo de la Fuerza Aérea, versión que fue negada por el ministro y comentó que en el momento del operativo no se tuvo información que en el campamento rebelde se encontraban los adolescentes, quienes fueron reclutados por los irregulares.

Dichos partidos pidieron ayer una moción de censura contra el ministro Botero, que se iba a votar la próxima semana.

El ministro de Defensa comentó que la sesión de ayer realizada en la plenaria del Senado fue «un debate político lleno de imprecisiones y partes a medias».

A su turno, el comandante de las Fuerzas Militares afirmó que los asesores operacionales de ese organismo dieron el visto bueno para el bombardeo.

«Es necesario tener en cuenta que quien infringe el derecho internacional humanitario es quien coloca a una persona protegida en un riesgo que no debe soportar, es decir que el GAO (Grupos Armados Organizados) residual es quien comete el crimen de guerra al reclutar de manera forzosa a menores de edad y ubicarlos en un objetivo militar», explicó el alto oficial esta mañana en la declaración emitida a la prensa.

Luego de la desmovilización de las FARC, en 2016, algunos de sus integrantes continuaron delinquiendo en varias regiones del país y están dedicados al narcotráfico y a otras acciones ilegales.

T/Xinhua
F/AP