Participarán 17.591 facilitadores en 18.423 ambientes estudiantiles|Misión Robinson II Productiva graduará a un millón de venezolanos en el año 2018

«Con una clase magistral el venidero sábado 23 de enero comenzará la Misión Robinson II Productiva. La clase podría ser presidida por el presidente Nicolás Maduro, quien tuvo esta idea de incorporarle a la misión este extra, que es la formación laboral», explicó Marisol Calzadilla, directora general de la Misión Robinson II Productiva.

En conversación con el Correo del Orinoco amplió: «La Misión Robinson no parará nunca las inscripciones. Se puede hacer de varias formas incluyendo las bases de misiones y nuestra página web. Las inscripciones continuarán esta semana».

La página web es robinsonproductivo.me.gob.ve. Para esta oportunidad se diseñó el método «Yo sí puedo seguir», que incluye materias de educación primaria, lenguaje de señas, enseñanza de lenguas indígenas y formación en trabajo productivo. Se espera que para la primera fase participen 300.000 estudiantes; mientras que a mediados de años estarán 400 mil más y a finales de año sumarán 300 mil más.

La meta será graduar un millón venezolanos y venezolanas para el año 2018: «Es una metodología que permite la contextualización, por lo que hemos agregado el componente productivo. No hay otro camino sino la educación».

Se debe recordar que las clases serán de lunes a jueves en la noche, mientras las prácticas productivas serán de día los viernes, para quienes deseen cursar de primer a sexto grados. Dos años durará el proceso completo para graduarse en educación primaria.

FORTALEZAS Y PRODUCCIÓN

Al cierre de diciembre existen 18.423 ambientes estudiantiles y 17.149 facilitadores y facilitadoras entre voluntarios y profesionales dispuestos para este proyecto: «La idea es que estamos luchando para superar el modelo rentista y convertirnos realmente en un país productor, ya que tenemos las facilidades».

«Debemos destacar en la Misión Robinson la fortaleza con los facilitadores. Para ser facilitador se requiere amor al prójimo, al compatriota, a la patria y a la revolución. Todo eso ayuda a que ese facilitador capte a esa persona adulta para que estudie. Recuerda que los adultos por lo general tenemos cierta resistencia al estudio», explicó la funcionaria.

Los ambientes estudiantiles se pueden montar en un taller, una industria, el patio de una casa o en un colegio: «Lo importante es que si tengo siete u ocho personas para estudiar abro un ambiente, pero una vez culminado el período de dos años de estudios y no se inscriben más, cierro este ambiente y abro otro donde se necesite».

La directora general destacó que los talleres metodológicos que se dan cada quince días: «Nos ha permitido elevar el nivel académico de nuestros facilitadores y facilitadoras, que pueden ser bachilleres pero tienen ahora mayor nivel de conciencia y formación. Muchos de ellos han escogido la carrera de la docencia a partir de esta experiencia en la Misión Robinson».

Desde el año pasado el presidente Nicolás Maduro equiparó el sueldo de los facilitadores y las facilitadoras con el salario mínimo establecido. Calzadilla agregó que existe además la Misión Robinson III: «Son círculos de lectura para quienes no deseen estudiar, pero les gusta leer. Agarran temas y los analizan, sobre todo utilizan mucho la prensa, porque les gusta mucho discutir. Recuerda que adulto tiene un cúmulo de experiencia mayor que el muchacho. Esta es otra alternativa».

T/Eduardo Chapellín
F/José Luis Díaz