El primer ministro de Italia, Mario Monti, confirmó durante la tradicional conferencia de prensa de fin de año que aprobará nuevas reformas «rápidamente» a favor del crecimiento económico, llamadas ‘paquete creci-Italia’, porque «la economía mundial depende de lo que haga ahora Italia».
El mandatario subrayó que la economía europea «depende de las reformas que haga Italia» y la economía mundial «depende de lo que haga Europa en su conjunto» por lo que «la economía mundial depende de Italia». Anunció que el Gobierno italiano pedirá a Europa que aumente el fondo de rescate.
Monti destacó que el Gobierno «está decidido a cambiar los prejuicios erróneos que tienen Europa y el mundo hacia Italia» porque todo el país «está en una operación muy compleja y difícil», aunque aseguró que todos los italianos deben estar «unidos y focalizados» en los objetivos.
Asimismo, declaró que «en el nuevo pacto europeo» es esencial «la nueva disciplina de balance». Sin embargo, apuntó que Italia debe integrarse en «una politica comunitaria para el crecimiento eficaz» que cuente también «con mayores recursos».
Monti informó también que se reunirá en enero con el primer ministro británico, David Cameron, así como con el presidente francés, Nicolás Sarkozy, y con la canciller alemana, Angela Merkel.
Dijo, además, que los mercados han dado una «pausa» a Italia, pero advirtió que «las turbulencias» todavía «no han acabado».
Por otra parte, el ‘premier’ señaló que el Gobierno beneficiará en esta nueva ‘fase’ reformas a favor «de las liberalizaciones, la competencia en el mercado y la flexibilidad del trabajo».
No obstante, destacó que «no especificará» ninguna reforma «por ahora» porque el Gobierno «continúa trabajando» en las nuevas medidas, aunque precisó que el Gobierno pretende su aprobación antes del próximo 23 de enero, cuando se celebre la reunión del Eurogrupo.
Indicó que dentro del sistema de trabajo italiano existe «una excesiva segmentación del mercado que afecta a los jóvenes» y ha destacado que el Gobierno pretende aprobar medidas para «flexibilizar» el sistema de trabajo.
Según explicó Monti durante la conferencia de prensa, las nuevas medidas pretenden «tutelar a los trabajadores, pero favoreciendo su reinserción en el mercado de trabajo».
Sin embargo, reconoció que la reforma del mercado del trabajo «es delicada y difícil» pero «esencial» y requerirá «un mayor acuerdo» con los sindicatos.
Afirmó que «la solución a la crisis» no se podía hacer «sin consolidar las cuentas públicas» que se ha realizado a través del decreto ‘salva-Italia’ aprobado el 16 de diciembre en el Parlamento.
No obstante, recalcó que este decreto reunía unos compromisos «que había asumido el Gobierno anterior» y ha destacado que «si no se realizaban estas medidas» Italia habría entrado «en una recesión explosiva».
Ante la propuesta de varios partidos de establecer un acuerdo con Suiza para controlar la evasión fiscal, Monti expresó que el Gobierno «analizará» esta propuesta en los próximos días.