El ministro francés del Interior, Gérald Darmanin, señaló que 540 personas fueron detenidas durante disturbios en las manifestaciones del 1 de mayo, convocadas por los sindicatos para rechazar la reforma de la jubilación.
Según el funcionario, 305 arrestos se registraron en esta capital y 406 policías y gendarmes sufrieron heridas en la jornada a nivel nacional.
En declaraciones al canal BFM TV, Darmanin precisó que la vida del uniformado atacado con un cóctel Molotov en París no corre peligro, aunque el prefecto capitalino Laurent Nuñez explicó que presenta lesiones graves por quemaduras en los brazos, las manos y el rostro.
El ministro del Interior no ofreció detalles de los manifestantes heridos ayer en las protestas en Francia, donde esta capital, Nantes y Lyon fueron las ciudades más afectadas por los enfrentamientos.
La víspera, la primera ministra Élisabeth Borne calificó de inaceptables los ataques contra fuerzas del orden, y políticos de diversos partidos condenaron la violencia al margen de quienes la practiquen.
Por su parte, el senador socialista Jérôme Durain denunció en la cadena Franceinfo la represión indiscriminada de unidades élites de la policía, en particular las brigadas móviles BRAV-M.
En el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, varios países criticaron ayer a Francia por la violencia policial, en el contexto de los debates por la presentación de su informe ante el mecanismo Examen Periódico Universal (EPU) de ese órgano.