Movimiento de boicot a Israel logra victoria en corte de Canadá

La jueza Anne Mactavish del Tribunal Federal de Canadá sentenció el lunes, 29 de julio, que el etiquetado que describe los productos elaborados en los territorios palestinos ocupados por el régimen de Israel como de origen israelí es “falso, erróneo y engañoso”.

La sentencia fue determinada tras una apelación hecha por un ciudadano canadiense tras la decisión de la Agencia de Inspección de Alimentos de Canadá (CFIA, por sus siglas en inglés) de permitir a productores israelíes de las colonias de Judea y Samaria, situadas en la Cisjordania ocupada, exportar sus productos al país norteamericano y etiquetarlos como producto israelí, en el marco de un Tratado de Libre Comercio (TLC) entre las partes.

La apelación fue introducida por David Kattenburg, quien argumentó que etiquetar los productos “de asentamientos en tiendas canadienses como ‘producto de Israel’ facilita la anexión de facto por parte de Israel de partes significativas de Cisjordania”.

Kattenburg apeló a la decisión de la CFIA, señalando que ni Canadá ni la comunidad internacional reconocen la soberanía israelí en los territorios ocupados —Cisjordania, los altos del Golán sirios, Al-Quds (Jerusalén)— y el caso terminó en el Tribunal Federal que este lunes falló en favor del demandante.

Caso similar en Europa

La decisión del Tribunal Federal de Canadá se produce cuando en Europa se está dirimiendo un caso similar tras la decisión de Francia de que los productos de colonias israelíes en Cisjordania lleven la etiqueta que indica: “producto de asentamiento israelí”.

El pasado junio, un abogado general del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (UE) concluyó que los productos originarios de las colonias israelíes en los territorios ocupados por este régimen deben dejar claro en el etiquetado su procedencia.

El abogado general razonó que “al igual que muchos consumidores europeos se oponían a comprar productos sudafricanos en la época del apartheid antes de 1994, los consumidores de hoy pueden, por motivos similares, oponerse a la compra de productos procedentes de un país dado, por ejemplo, porque no exista una democracia o se apliquen medidas políticas o sociales particulares que el consumidor considere repugnantes”.

Debido a sus políticas expansionistas en los territorios ocupados de Cisjordania y Al-Quds, Israel ya es objeto del bloqueo y sanciones por parte de países y organismos, entre los que se destaca el movimiento de Boicot, Sanciones y Desinversión (BDS), que sigue ganando cada vez más adeptos a nivel internacional.

El BDS tiene como objetivo aumentar la presión económica y política sobre el régimen israelí para poner fin a la ocupación y la colonización de tierras palestinas.

F/Hispantv
F/Web