La senadora y ex alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, murió este miércoles como consecuencia de un infarto en un céntrico hotel de Madrid.
La histórica dirigente del Partido Popular (PP) de Valencia se levantó con síntomas de ahogo y ansiedad y fue atendida de una crisis respiratoria durante media hora por los facultativos del Summa, que recibieron el aviso a las 07HOO hora local. Los médicos le practicaron una reanimación cardiopulmonar, pero no lograron reavivarla y falleció posteriormente a los 68 años de edad.
‘Quiero trasladar el más sentido pésame a su familia y amigos’, dijo la presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor, antes del inicio de una sesión plenaria que comenzó con un minuto de silencio en su honor.
Una de las figuras más destacadas del derechista Partido Popular (PP), del presidente del Gobierno Mariano Rajoy, Barberá (Valencia, 1948) acudió a declarar el pasado lunes ante el Tribunal Supremo (TS) por un presunto delito de blanqueo de capitales.
La justicia indagaba a la otrora regidora por un supuesto blanqueo de dinero cometido por la agrupación de Rajoy en el Ayuntamiento de Valencia, donde gobernó durante más de dos décadas.
Aforada por su condición de senadora, motivo por el cual solo podía ser juzgada por alto tribunal, Barberá se vio salpicada por la investigación de una trama de corrupción del PP en la Comunidad Valenciana, implicado en una hipotética financiación irregular.
El TS intenta averiguar si tras las aportaciones de mil euros realizadas al PP por personas vinculadas al partido en el consistorio de la citada ciudad mediterránea hay un delito de blanqueo, así como aclarar el origen del dinero.
De acuerdo con la investigación, concejales y asesores del citado ayuntamiento donaron mil euros a la formación oficialista, que al parecer les devolvió luego en efectivo para lavar dinero supuestamente ilícito.
En su declaración, la exalcaldesa negó hace dos días tener conocimiento de ese tipo de prácticas, aunque reconoció que entregó mil euros a su antiguo partido de forma desinteresada y que no se los devolvieron, según fuentes jurídicas citadas por la prensa.
Las pesquisas se relacionan con varios ingresos detectados en 2003, 2010 y 2011 por un importe superior a 200 mil euros y la justicia trata de dilucidar si el PP trató de blanquear ese dinero de hipotética procedencia ilícita.
Barberá anunció el 14 de septiembre su desafiliación de la agrupación conservadora ante las presiones tanto del PP como de la oposición, aunque rechazó los pedidos de dimisión de su asiento en el Senado, lo cual impidió que fuera juzgada por un tribunal ordinario.
La veterana política era una de las figuras más influyentes y mediáticas de la formación presidida por Rajoy y estuvo al frente de la tercera ciudad de España hasta que en las elecciones municipales de 2015 fue derrotada por una coalición de partidos de izquierda.