Sri Lanka confirmó este miércoles que los muertos a causa del deslave de la semana pasada en una plantación de té del centro-sur del país suman 10 hasta ahora y 28 los desaparecidos, muchos menos que los originalmente reportados.
Los primeros reportes dieron cuenta de hasta 250 personas sepultadas bajo el alud de tierra que el pasado miércoles bajó de las colinas contiguas y cubrió un caserío del distrito de Badulla, unos 190 kilómetros al oeste de Colombo. Ninguna organización ha explicado el porqué de la disparidad de las cifras
Las autoridades locales están empleando registros escolares y de votación para poner en claro cuántas personas podrían estar en realidad bajo la capa de lodo, vegetación y escombros, que se extendió por unos tres kilómetros y en algunos puntos alcanzó un grosor de hasta 10 metros.
El Centro de Gestión de Desastres precisó que más de mil 700 pobladores de la villa están en albergues temporales porque sus viviendas, construidas al estilo de la época colonial, cuando los británicos iniciaron las plantaciones de té en Sri Lanka, fueron parcial o totalmente destruidas por el alud.
Sobre esa y otras regiones penden alertas de deslaves debido a que sobre la mayor parte del país siguen cayendo intensas lluvias.