Historia Nevado|Muku: guardián de la Misión Nevado (Opinión)

El perro Mucuchíes es la raza oficial canina de Venezuela. Se originó hace aproximadamente 400 años en la cordillera del estado Mérida gracias al cruce de varias razas introducidas por los conquistadores españoles. Posee un pelaje abundante y un porte imponente que enmarca una gran nobleza y lealtad hacia sus protectores. El Libertador tuvo entre sus mejores amigos a Nevado, un ejemplar de Mucuchíes, que lo acompañó en innumerables batallas y travesías hasta que cayó como un héroe en la Batalla de Carabobo, contienda que selló la independencia de nuestra Patria. ¿Se imaginan a Nevado, desnutrido y sucio deambulando entre cartones y verduras podridas en las inmediaciones del mercado de Quinta Crespo? Pues así fue.

Jazmín León de Parra estaba por el lugar cuando vio a un enorme perro negro y flaco. La conmovió su extrema debilidad y se acercó para darle agua. El animal bebió con avidez y se desmayó. Al verlo inconsciente intentó parar un taxi para llevarlo a un centro asistencial. Gisela de Medina pasaba por allí y entre las dos tomaron un taxi y lo llevaron al CVI de la Misión Nevado en Nuevo Circo, donde ingresó con un cuadro de desnutrición severa y una gusanera en uno de sus muslos. Ambas se llevaron una gran sorpresa cuando el veterinario les informó que el perro es un mestizo de Mucuchíes, nuestro perro nacional. Ese día, además de la atención médica obtuvo su nuevo hogar y su nombre: Muku.

Cuando vayan al CVI de Nuevo Circo lo verán, sentado como un rey en su sofá favorito recibiendo a los perros y gatos, que como él, estaban enfermos y abandonados a su suerte. Muku le da cariño y compañía a los trabajadores y voluntarios que hacen vida en el CVI, así como Nevado lo hizo con el Libertador. Como está viejito, se mueve tranquilo y parsimonioso alegrando la jornada laboral con su meneo de cola y su mirada dulce.

Al igual que su ancestro Nevado, Muku vivió batallas y travesías, pero a diferencia del primero, tuvo la suerte de llegar a viejo y haber encontrado un hogar cálido y lleno de amor. Si piensan adoptar, recuerden que existen muchos “guerreros” que merecen pasar sus últimos años en el hogar seguro y amoroso que ustedes pueden les brindar.

T/ Equipo Editorial Misión Nevado