Según informe del Banco Interamericano de Desarrollo|Brechas impiden en Panamá acceso de pobres a la producción

Brechas sociales en educación, salud y servicios básicos impiden en Panamá la integración de los pobres a las áreas productivas en expansión, señaló un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

El documento resalta que esta condición determina que la población en los niveles inferiores tenga una participación desproporcionadamente baja en el ingreso, rasgo distintivo del país frente al resto de América Latina.

Las marcadas fisuras y las deficiencias institucionales contrastan con sectores muy dinámicos como el conglomerado del Canal, que dispone de regímenes especiales los cuales facilitan la inversión y demandan fuerza de trabajo calificada, señaló la institución.

Por otra parte, ramas como agricultura y manufactura emplean solo a la quinta parte de la población, mientras están sujetas a restricciones generales del marco jurídico y regulatorio del país, lo cual provoca la baja inversión y productividad, según el BID.

Estas razones, expuestas recientemente, ubican a Panamá como uno de los más desiguales de Latinoamérica y el Caribe en la distribución de la riqueza, y a mantener casi invariable la indigencia y los elevados niveles de pobreza en zonas rurales y comarcas indígenas.

El crecimiento económico panameño permitió reducir el indicador al 25,8 por ciento de la población, una tasa por debajo de la media regional y que desentona con los ingresos del país, considerado de renta media, en una pequeña población que apenas llega a 3,9 millones de habitantes.

Los hogares panameños registraron en 2013 un promedio de mil 278 dólares de ingresos, pero el indicador en Ciudad Panamá fue de mil 674, el más alto, mientras en la comarca de la etnia NgÃñbe Buglé la media fue de 311, el más bajo.

En un recorrido por el distrito capitalino de San Miguelito, las comarcas indígenas Wounaam, Guna Yala y Ngabe Buglé, y la ciudad de Colón, en la entrada atlántica del Canal de Panamá, Prensa Latina pudo apreciar la pobreza y el deteriorado estado de las viviendas de los sectores más humildes del país.

Colón aloja en su seno a la Zona Franca, la segunda más grande del mundo, después de Hong Kong, que solo en 2013 movió 27 mil millones de dólares en importación y reexportación, según estadísticas de la Contraloría Nacional.

Además, la ciudad tiene ingresos por medio de otros servicios asociados a la vía interoceánica, la terminal de contenedores y la de cruceros, aunque la economía informal predomina en el casco urbano.

Otras regiones como Darién, al oeste, o las comarcas indígenas, distribuidas por la geografía itsmeña, sufren aún más la desigualdad en la redistribución de la riqueza.

En 2011 el Producto Interno Bruto per cápita fue de 13 mil 90 dólares, en una población que entonces era de 3,4 millones de habitantes.

Las proyecciones del Gobierno Nacional para el quinquenio 2015-2019 prevén rescatar al menos a 150 mil panameños de la pobreza y desarrollar inversiones de carácter social e infraestructura, que incluye la renovación urbana de Colón.

Fuente/PL
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