Un temporal de vientos huracanados y lluvia intensa azotó el noroeste de Francia y golpeó este viernes a Alemania y Suiza, con miles de viviendas sin luz, caos en el sistema de transporte de la región y el naufragio de un petrolero que derramó crudo en la costa francesa de Bretaña.
El temporal, con vientos de hasta 150 kilómetros por hora, no causó heridos graves ni muertos, aunque sí daños materiales considerables.
El ministro del Interior francés, Claude Gueant, afirmó que Francia «logró escapar a lo peor del temporal».
«Todo indica que no hay víctimas», dijo el funcionario, aunque agregó que «un número» de personas que reside en zonas bajas de Bretaña debió ser evacuada por la tormenta.
Las autoridades en Francia confirmaron que al menos 400.000 personas quedaron sin electricidad debido a la caída de postes de luz y de tendido eléctrico, principalmente en el este del país.
La tormenta Joachim ha azotado a Francia desde el jueves por la noche, con vientos que provocaron olas de hasta 7 metros de alto.
El temporal hizo encallar al buque petrolero TK Bremen, con bandera maltés, que derramó esta mañana «algo de crudo» frente a las costas de Bretaña, según informaron los servicios de emergencia locales.
«Por suerte el nivel de polución es limitado», declaró Marc Gander, del Servicio de Guardacostas francés, al confirmar que las autoridades regionales desplegaron a un equipo de expertos para tratar de contener el derrame y a vaciar las 180 toneladas de petróleo y 40 toneladas de diesel del buque.
Los 19 miembros de tripulación de la embarcación fueron evacuados hoy en helicóptero.
Por su parte, la Fiscalía de Brest, en el noroeste de Francia, confirmó que abrió una pesquisa por el derrame de crudo.