Esta capital redujo en lo que va de año a 3.52 por mil nacidos vivos su tasa de mortalidad infantil, la más baja de la historia. Este es un logro que es preciso mantener, dijo a la televisión nacional Mario Pérez, jefe del programa materno-infantil en la urbe habanera.
Pérez indicó que el resultado se debe a los esfuerzos del Estado cubano en la atención a las embarazadas desde etapas tempranas de la gestación.
Se informó, además, que de enero a agosto nacieron 300 niños más en La Habana en comparación con igual período de 2012.
De acuerdo con estimados, en esta ciudad vienen al mundo como promedio diario de 60 a 65 nuevos habitantes de la isla y hasta la fecha en esta ciudad en 2013 nacieron vivos 11 mil 927 niños.