El oceanógrafo David Zee comparó el derrame en un pozo de la petrolera Chevron en el litoral brasileño con el ocurrido el año pasado en el golfo de México, y sostuvo que la filtración iniciada hace 13 días es una señal «amarilla».
«Debemos ver este accidente recordando lo que pasó en México, aquel fue mucho más grave» pero podría «ocurrir acá, esto fue una luz amarilla, si no tomamos medidas podemos tener una señal roja, como en México» declaró Zee.
La pérdida de petróleo en el Campo de Frade, a 370 kilómetros de las costas cariocas no alcanzó la magnitud de una catástrofe «si no invertimos» y se capacita al personal técnico pueden ocurrir «situaciones graves» cuando comience a explotarse las reservas gigantes en aguas ultraprofundas, zona conocida como «pre-sal».
Zee declaró al canal Globonews que Brasil por lo pronto no está capacitado para este tipo de siniestros y necesita realizar «inversiones» en la formación de técnicos y equipos de emergencia así como en tecnología y equipamiento para eventuales catástrofes ambientales ocurridas en la explotación petrolera.
Tras la tragedia de México el gobierno brasileño anunció el Plan Nacional de Contingencia sobre accidentes que hasta el momento no está en vigor.