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El presidente Rafael Correa afirmó este domingo en rueda de prensa que la tragedia por el terremoto es muy grande «pero sabremos salir adelante» luego de ponerse al frente de las labores de salvamento y reconstrucción en respuesta a los efectos de un terremoto de 7,8 grados acontecido ayer.
«Grandes las tragedias, los desafíos aún más, pero más grande es la fuerza del pueblo ecuatoriano. Inmenso el dolor pero aún mayor es el espíritu de nuestro pueblo», expresó el Presidente.
Señaló que el Gobierno está atendiendo la emergencia y que pese a la tragedia son pequeños los daños frente a lo que pudo ocurrir.
Respecto a la cifra de víctimas mortales, informó que hasta el momento son 272 pero podría aumentar porque aún siguen removiendo escombros, «la prioridad es el rescate», apuntó.
Para estas labores trabajan 10 mil efectivos de las fuerzas armadas y cinco mil de la policía nacional. «En las próximas horas llegarán 2 hospitales móviles a Portoviejo y Chone».
El jefe de Estado aterrizó esta tarde en la base aérea de Manta, provincia de Manabí, la más devastada por el sismo que, según el Instituto Geofísico, ya tiene más de 135 réplicas en la zona de Pedernales, lugar del epicentro.
Tras conocer la noticia, Correa llamó a la unidad nacional en Ecuador y firmó un decreto de excepción y movilización nacional a fin de enfrentar las consecuencias del movimiento telúrico más grave que ha vivido su nación desde 1979.
Hasta el momento, suman 272 fallecidos y mil 580 heridos, pero las autoridades estiman que las cifras pueden aumentar en las próximas horas, pues aún continúan las labores de búsqueda y rescate.