Cuba condenó enérgicamente el asesinato contra Saif Al Arab Gaddafi, el hijo más joven del presidente de Libia, Muammar Gaddafi, así como tres de sus nietos, quienes fueron asesinados, este sábado, en una vivienda familiar, por un bombardeo de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
A través de un comunicado difundido por la cancillería, la nación antillana acusó a la OTAN de perseguir el cambio de régimen y el control de los recursos petrolíferos de Libia, mediante sus bombardeos.
El embajador cubano en Libia acudió al lugar donde se produjo el bombardeo y “confirmó que la vivienda está enclavada en un barrio residencial, donde se encuentran varios inmuebles diplomáticos», reseñó la agencia AFP.
En ese sentido, la cancillería aseveró que esas acciones criminales se unen a los intensos bombardeos, incluso con aviones no tripulados norteamericanos, “en los que mueren personas inocentes”.
El asesinato perpetrado contra los familiares de Gaddafi fue confirmado por el portavoz del gobierno libio Ibrahim Musa, quien dijo que la casa del hijo menor del líder de la nación norafricana fue atacada con potentes medios.
Es la segunda vez que Gaddafi pierde familiares en bombardeos de tropas extranjeras, en 1986 murió su hija Jana, asesinada en un ataque de fuerzas de Estados Unidos contra la residencia del presidente libio.
Desde que comenzaron los bombardeos contra Libia el 19 de marzo pasado, las potencias imperiales han matado a cientos de civiles y destruido edificios públicos, como hospitales, escuelas y universidades.