A realizarse este jueves en Bruselas| Cumbre de Unión Europea será escenario de profunda crisis económica

Expectativas y fricciones internas entre los gobiernos de la región son el prólogo a la Cumbre de la Unión Europea (UE), que se llevará a cabo este jueves en Bruselas, capital de Bélgica, teniendo como eje la situación de Grecia y un posible nuevo préstamo para paliar su déficit interno.

Desde hace semanas, la crisis europea despertó discusiones y críticas, principalmente frente a las posibilidades de «contagio» en naciones como España o Gran Bretaña, que igualmente ya aplican planes de ajustes para detener la caída de sus economías, aunque esto implique fuertes recortes a los gastos sociales.

Hasta el momento las medidas impuestas tanto en Grecia como en otros países, que también estipulan despidos masivos y privatizaciones de empresas públicas, desataron masivas protestas.

La cumbre, en la que se reunirán los 17 miembros de la Eurozona, tendrá como trasfondo el debilitamiento del bloque, acosado por la desocupación y la fragilidad de sus sistemas financieros.

La principal diferencia que se presenta está encabezada por las posturas de Francia y Alemania, por lo cual la noche de este miércoles el presidente Nicolas Sarkozy viajará a Berlín para entrevistarse con la canciller Angela Merkel.

La gobernante alemana intentó durante días frenar el encuentro de la UE y declaró que de esa reunión no se debían esperar grandes pasos hacia la resolución de los problemas de la deuda griega.

En contraste, el ministro francés de Economía y Finanzas, François Baroin, se pronunció a favor de dar un fuerte mensaje de apoyo a Grecia.

“Hay una gran convergencia de puntos de vista, un entendimiento sobre lo fundamental, una voluntad de hacer más sostenible la deuda griega y hay aún algunas discusiones sobre la participación del sector privado”, expresó el funcionario.

A esta disputa se sumaron los dichos del titular de la Comisión Europea (CE), José Manuel Barroso, quien indicó que “nadie debe hacerse ilusiones”, aunque aclaró que se necesita “una respuesta” porque “las consecuencias negativas se harán sentir en toda la Unión Europea y más allá”.

Para Barroso, lo fundamental es mejorar la sostenibilidad de la deuda pública, proveer de liquidez al sistema bancario europeo y asegurar la implicación del sector privado en el plan de rescate.

El economista titular de la asociación Planet Financa, Jacques Attali, analizó que si no se dan pasos “hacia un poco más de federalismo, el euro desaparecerá. No es una cuestión de ser federalista o antifederalista, es una cuestión de que Europa no sobrevivirá sin un presupuesto federal más consistente”.

Entrevistado por Euronews, el también ex presidente fundador del Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo (BERD), explicó que Alemania “es el enfermo de Europa y se verá de aquí a 20 años, porque la debilidad de una nación se mide esencialmente por su demografía y su capacidad de pensar en una estrategia duradera, que no existe”.

Attali remarcó que si la crisis europea explota y “Grecia tuviese que abandonar el euro, con España e Italia siguiendo sus pasos, el euro subiría mucho y Alemania, que apuesta por sus exportaciones, se encontraría en una situación trágica, lo cual no sería bueno para nadie”.

Por último, el Gobierno griego calificó la cumbre de la UE como decisiva para la región, por lo cual estimó la necesidad de que el pago de su deuda sea viable, se reduzca el peso sobre los ciudadanos, se protejan los depósitos y sea mayor la liquidez en el mercado.

El monto del rescate para la nación helena oscila entre 92.000 y 120.000 millones de euros, y si es aprobado la sociedad griega tendrá que soportar nuevos recortes y ajustes como los aprobados desde hace más de un año.

Fuente/AVN