La Duma estatal (cámara baja) de Rusia acordó hoy una petición al primer ministro Dmitri Medvedev sobre el retorno del país al horario de invierno, uno de los temas que más preocupa a la opinión pública nacional.
Durante el debate en esa instancia legislativa, el titular del comité parlamentario de protección de la salud, Serguei Kalashnikov, indicó que el asunto guarda total correspondencia con las prerrogativas del Gobierno.
En su opinión, el proyecto de ley introducido en la Duma a inicios de enero, sin que pueda prosperar, debe salir de la agenda legislativa y solucionarse mediante una disposición del Ejecutivo.
Desde hace tres años la Federación de Rusia está sujeta a horario de verano permanente, con criterios encontrados.
La cuestión del retorno al de invierno, suprimido en 2011 por Medvedev, figura en el centro de crecientes debates en la opinión pública nacional en los últimos tiempos.
El proyecto parlamentario sugiere el establecimiento de 10 husos horarios para Rusia, con un máximo de aproximación al tiempo universal coordinado (UTC), en lugar de las nueve zonas en las que está dividido el país más extenso del planeta, que hasta 2011 contaba con 11.
En caso de aprobarse la ley federal, la normativa entraría en vigor en la madrugada del 26 de octubre venidero.
Los autores de la iniciativa sostienen que como resultado de la suspensión del horario de invierno en el otoño de 2011, en el 80 por ciento del territorio nacional el tiempo administrativo se anticipó dos horas al huso horario.
En regiones de la parte europea, el occidente de Siberia y en Kamchatka el tiempo que rige aventaja en una hora a la franja horaria.
Medvedev admitió que el paso al horario de invierno provocaba estrés y enfermedades en la población, pero por otra parte, argumentó que aumentaría el número de horas de luz durante el calendario anual.
Hace tres años esa idea fue apoyaba por el 73 por ciento de los rusos, pero a fines de 2013 la cifra de adeptos se redujo a 32 por ciento.
La intención del proyecto es el retorno de Rusia al cálculo de la hora local y supone incluir a Moscú en la tercera zona como referencia de la escala nacional (+3 y no +4, vigente desde 2011 para la mayor parte de la porción europea).
Con ello se eliminaría la diferencia de más de una hora entre los sujetos administrativos de la Federación, según los autores del documento.
De acuerdo con la disposición adoptada en 2011 por Medvedev, 24 regiones rusas operan por la hora local, dos por encima de su zona horaria y 54 sujetos territoriales viven una hora por delante del tiempo fijado, mientras que solo en siete regiones la población vive en un horario cercano a la zona horaria.
En una extensión de 17 millones 125 mil 246 kilómetros cuadrados funcionan desde entonces las zonas horarias desde +3 hasta +12 UTC.