La empresa de cementos suiza Holcim anunció este jueves que suprimirá alrededor de 300 empleos en su sucursal española, nota que agravará la crisis económica del llamado viejo mundo, menciona la revista Handelszeitug.
Esa compañía constituye la segunda en importancia a nivel mundial de ese producto y afectará a su ejército de trabajadores en España, que actualmente lo integran mil 53 empleados.
Holcim ya cerró una fábrica cementera en Lorca, sureste español, y entre sus planes de recortes abarcará también al personal administrativo y comercial.
Los economistas alertan que el sector constructivo español resultó uno de los principales motores de crecimiento económico para esa nación a inicios de la década de 2000 y ahora está en una profunda crisis.
Voceros de la cementera suiza señalaron que a partir de 2008 tuvieron un dramático retroceso en sus producciones, lo cual obliga al recorte.
Esas fuentes añadieron que el corte forma parte de un plan de reestructuración anunciado en mayo pasado e incluye un programa de indemnizaciones pactado en julio, pero insuficiente para algunas fuentes gremiales.
Los voceros evitaron comentarios sobre otras supresiones de puestos laborales, aunque para los analistas este anuncio puede ser el principio de otras podas debido a la crisis económica global.