Este miércoles|Irán acusó a EE.UU. de desestabilizar paz regional

Javad Larijan, secretario general del consejo de derechos humanos de Irán

El gobierno de la República Islámica de Irán acusó este miércoles a Estados Unidos (EE.UU.) de generar hostilidad a través de amenazas y falsas alegaciones para crear una atmósfera que puede desestabilizar la paz en la región.

La denuncia fue hecha este miércoles por el secretario general del consejo de derechos humanos de Irán, Javad Larijani, en una conferencia de prensa en la sede de Naciones Unidas en Nueva York.

La comunidad internacional y la ONU no pueden ser usadas por Washington para buscar sus propios objetivos, dijo el funcionario, al criticar a los dos principales partidos norteamericanos por avivar la agresividad contra Irán como tema de competencia electoral.

Larijani repudió la nueva compaña lanzada en Estados Unidos acerca de un supuesto complot iraní contra el embajador de Arabia Saudita en Washington y aseguró que se trata de un plan estadounidense para agudizar la inestabilidad.

No hay una sola evidencia que respalde la versión propalada el mes pasado, apuntó al denunciar el intento norteamericano y saudita de impulsar ante la Asamblea General de la ONU una resolución sobre ese asunto.

En la misma línea, el experto iraní repudió un reciente informe del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) que señaló un supuesto proyecto de Teherán para fabricar armas nucleares.

Explicó que ese tipo de armas no añaden nada a la seguridad de Irán porque «nuestra fuerza militar es suficiente para enfrentar cualquier amenaza».

Además, precisó que el desarrollo de esa clase de armamento es contraria a la jurisprudencia y a la Sharia islámica.

El programa iraní para el uso pacífico de la energía nuclear es un orgullo nacional y «no hay límites para nuestro progreso en esa área», apuntó.

Interrogado sobre la situación en torno a Siria, Larijani se pronunció contra el ejercicio de presiones exteriores, en especial de carácter militar.

Al respecto, advirtió sobre el peligro que representa la campaña de agitación y de incitación a la violencia en ese país por parte de Estados Unidos y de sus aliados europeos y del mundo árabe.

Todas las manos deben quedar afuera y dejar a pueblo sirio que decida por sí mismo, enfatizó al opinar que el problema en Siria no es la democracia, sino la pretensión occidental de implantar en Damasco un gobierno sometido a Israel.

Fuente/Prensa Latina
Texto/CO
Foto/Archivo