Los movimientos sociales participantes en el Foro Social Temático (FST)-2012, que concluye este domingo en el estado brasileño de Río Grande do Sul, convocaron a una gran marcha global en 5 de junio venidero contra el capitalismo.
La movilización internacional llevará por lema Contra el capitalismo y en defensa de la justicia social y ambiental, así como tendrá por objetivo marcar la posición de los movimientos sociales sobre la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible, Río+20, que se efectuará 15 días después en Brasil.
La fecha escogida es precisamente la instaurada por la Organización de Naciones Unidas (ONU) como Día Internacional del Medio Ambiente y por ello la Asamblea de los movimientos sociales desean que las masas populares ocupen las calles de todas las ciudades del mundo en una gran jornada de protesta y rechazo.
De acuerdo con el boletín Carta Mayor, la jornada global definirá posiciones sobre las cuestiones ambientales y sociales que serán discutidas en la Río+20, a realizarse en Río de Janeiro, del 22 al 26 de junio venidero, con la esperada presencia de altos representantes de las 192 naciones miembros de la ONU.
«La tentativa de verdear el capitalismo, acompañada de la imposición de nuevos instrumentos de la ‘economía verde’, es una alerta para que los movimientos sociales reforcemos la resistencia y asumamos el protagonismo en la construcción de verdaderas alternativas a la crisis», apuntan las entidades sociales.
Los cerca de mil 500 participantes en la Asamblea de Movimientos Sociales, en representación de 30 países, aprobaron un documento sobre la marcha global.
Según Carta Mayor, el encuentro de las entidades sociales debatieron dos de los mayores desafíos impuestos hoy a la izquierda mundial: construir una agenda unificada de luchas y movilizar a las grandes masas populares para garantizar la imposición de derrotas reales al capitalismo.
Por los discursos e intervenciones de los participantes de entidades nacionales e internacionales de la sociedad civil quedó evidente que la unificación de esa agenda no es una tarea fácil, mientras el segundo reto dependerá de la capacidad de movilización en cada país, indica el medio informativo.