El presidente de Estados Unidos (EE.UU.), Barack Obama, planea disminuir el número de Guardias Nacionales en la frontera con los Estados Unidos Mexicanos y aumentar las misiones de aviones sin piloto.
Los cambios operacionales bosquejados apuntan a que la Casa Blanca pretende reducir de manera «drástica y vertical» el inventario de mil 200 soldados desplegados en California, Arizona, Nuevo México y Texas, reportó el diario Houston Chronicle.
Al parecer la administración Obama quiere priorizar la vigilancia aérea robotizada en lugar de la supervisión militar humana, después de numerosas denuncias relacionadas con presuntos abusos de las patrullas fronterizas en contra de los inmigrantes.
Voceros oficiales declinaron precisar cuantos Guardias Nacionales permanecerán en su puesto luego de la reestructuración, comentó la fuente.
Se prevé que cientos de infantes serán sustituidos por unas pocas docenas de tropas especializadas en el manejo de drones (aviones no tripulados), similares a los que ha usado el Pentágono en las guerras de Afganistán o Irak.
Es un paso en la dirección correcta en cuanto a la tecnología, puede significar la próxima generación en sistemas de seguridad, opinó el representante por Texas Michael McCaul, en una extraña aprobación republicana ante planes de la Casa Blanca.
Este lunes trascendió que la Corte Suprema de Estados Unidos aceptó estudiar el caso de la polémica ley antiinmigrante de Arizona, denominada SB1070, criticada por el gobierno y varias instituciones federales.
La legislación sureña ha provocado fuertes protestas por parte de activistas proinmigrantes y hasta de gobiernos latinoamericanos debido a sus estatutos considerados demasiados drásticos y hasta con perfiles racistas.
Casi 12 millones de extranjeros indocumentados viven en este país, algunos desde hace 10 años, un hecho que Washington ha enfrentado en 2011 con el aumento en las deportaciones masivas.