El enviado especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) a Siria, Lakhdar Brahimi, reiteró este miércoles que es inviable una solución militar para la violencia que vive el pueblo sirio desde hace más de dos años y llamó al diálogo “entre todos los países con intereses e influencia” en esa crisis.
A través de una declaración, distribuida en la sede de la ONU en Nueva York, Estados Unidos, Brahimi manifestó que el envío de más armas a Siria, como lo han estado haciendo algunos países, profundizará el conflicto. Por ello, insistió en que debe cesar esa actividad, reseñó Prensa Latina.
El enviado de la ONU señaló que ninguna de las partes enfrentadas en el conflicto, que comenzó en marzo de 2011, está en condiciones de ganar la pugna. Indicó que mientras continúa el enfrentamiento, siguen las muertes y la destrucción en Siria.
Brahimi también se reunió con el llamado grupo de Elders (consejeros) en Wahington. Se trata de un conjunto de líderes políticos con experiencia e influencia para trabajar por la paz, la justicia y los derechos humanos, fundado en 2007 por el expresidente sudafricano Nelson Mandela.
Durante ese encuentro, el enviado de la ONU a Siria llamó a salir del círculo vicioso del conflicto a través de un proceso político, en el que se sienten las partes en conflicto, además de todos los países que tienen intereses o influencia en la crisis.
Brahimi trabaja con Rusia y Estados Unidos en la convocatoria de una conferencia internacional sobre Siria para la búsqueda de un arreglo político al conflicto. No obstante, hasta ahora no se ha fijado una fecha para llevarla a cabo.