La oposición en Ecuador, que convocó para este jueves a un paro nacional en protesta contra las leyes de redistribución de la riqueza (herencias) y de ganancias extraordinarias (plusvalía) promovidas por el gobierno, ha recurrido a expresiones violentas como la quema de cauchos y el cierre de vías principales, como métodos para hacerse ver ante la falta de apoyo popular.
«Se han congregado personas del Movimiento Popular Democrático (MPD), que representan sectores muy violentos, que están acostumbradas a hacer la política del golpe, del palo, de la piedra, y que han comenzado a cerrar algunas vías y lamentablemente han usado la violencia», indicó el Canciller y dirigente de la Revolución Ciudadana, Ricardo Patiño, durante una vigilia realizada por el pueblo ecuatoriano en respaldo al gobierno progresista y a las políticas inclusivas del presidente Rafael Correa.
«Hoy decidieron usar la violencia y nos da mucha pena porque le hace daño a la democracia. La democracia ecuatoriana es absolutamente robusta. Tiene ocho años construyendo consenso y leyes con el voto de la gente en las urnas, no con la violencia, sino con el diálogo permanente», agregó Patiño en transmisión de Telesur.
Patiño explicó que las acciones violentas de calle, registradas principalmente en la ciudad de Guayaquil, han sido ejecutadas por grupos de alrededor de 50 personas, que intentan magnificar la situación y hacerla ver como un clamor nacional ante los medios de comunicación.
«Ya no buscan el apoyo de la gente, porque no lo han conseguido, buscan el caos. En 10 días nadie más se les sumó y entonces ahora usan la violencia en las calles», rechazó el canciller, quien se encuentra ejerciendo una licencia de dos meses de su cargo, tiempo en el cual ha sido encargado de reorganizar las bases del partido gobernante, Alianza País, ante los recientes intentos desestabilizadores de la derecha ecuatoriana.
Igualmente señaló que los cuerpos de seguridad del país se encargarán de preservar el orden en las calles para garantizar el despliegue normal de las actividades de todos los ecuatorianos.
El mes pasado el Ejecutivo anunció el retiro temporal de las leyes mencionadas y llamó al debate nacional de las mismas; sin embargo, grupos de derecha siguen intentando desestabilizar la nación a través de acciones violentas y contra la economía, esto de cara a las elecciones presidenciales que se realizarán en el país suramericano en febrero de 2017.
Ante las pretensiones de la derecha de acabar con el gobierno constitucional de Correa, movimientos sociales, federaciones sindicales, estudiantes y profesionales han manifestado su respaldo al mandatario, así como su apoyo al llamado al diálogo nacional.