El secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Anders Fogh Rasmussen, anunció que los países miembros de la alianza del norte acordaron extender la agresión militar contra Libia por 90 días más.
La medida, aprobada durante la sesión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, implica que los ataques continuarán desde el 27 de junio hasta finales de septiembre.
Al respecto, Fogh declaró que esta decisión «envía un mensaje claro al régimen de Gaddafi: Estamos decididos a continuar con nuestra operación para proteger al pueblo libio. Nuestra decisión también envía un mensaje claro al pueblo de Libia, la OTAN, nuestros socios y toda la comunidad internacional».
Hasta el momento, la agresiva incursión militar de la OTAN en Libia cobra diariamente la vida de cientos de civiles inocentes, quienes mueren a causa de los bombardeos indiscriminados de la alianza del norte contra zonas residenciales del centro de Trípoli, capital de Libia.
El secretario de la OTAN indicó que la alianza garantizará que el pueblo libio “tenga la oportunidad de forjar su propio futuro».
Sin embargo, la razón que los grupos separatistas apoyados por la OTAN han esgrimido desde el inicio de los ataques, el 19 de marzo, ha sido la renuncia inmediata del líder de la revolución, Muammar Gaddafi.
Un despacho de la agencia Afrol reseñó que el gobierno Libio ha propuesto en reiteradas oportunidades su decisión de cese al fuego y las agresiones de la OTAN contra la población civil, lo cual ha sido rechazado por los separatistas.
El Consejo Nacional de Transición (CNT), que se arroga el liderazgo de los separatistas, ha pedido tanto en escenarios internacionales como desde Trípoli que la OTAN intensifique los ataques contra suelo libio.
Un balance hecho por el gobierno libio da cuenta de 718 civiles muertos y 4 mil 67 heridos a causa de los ataques perpetrados por la OTAN contra la nación del norte de África.
La cantidad de bajas civiles corresponde a los caídos entre el 19 de marzo y 26 de mayo de 2011.
El portavoz del gobierno de Libia, Musa Ibrahim, destacó que del total de heridos, 433 están en estado de gravedad. Aclaró que estas cifras no tienen en cuenta a los militares caídos.