Las fuerzas armadas estadounidenses admitieron recientemente que el Comando de Operaciones Especiales Conjuntas dirige 20 prisiones secretas en Afganistán.
Medios denunciaron este lunes que en los denominados “sitios negros” los reclusos pueden ser interrogados durante semanas sin que se presenten cargos en su contra.
Por su parte, funcionarios militares y del gobierno estadounidense, confirmaron la existencia de esos centros, donde se obtiene información de inteligencia de forma temporal.
El Pentágono reconoce que los detenidos, que supuestamente tienen alto rango en el Talibán, al-Qaeda u otros grupos rebeldes, permanecen en estos lugares durante 14 días y un encierro más amplio ante circunstancias extraordinarias, que podría ser hasta de nueve semanas.