La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, recibió este jueves en el Palacio de Planalto a la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, con quien trató la situación económica global y sobre el cambio climático.
Tras la reunión a puertas cerradas, Lagarde afirmó que intercambiaron puntos de vista sobre el escenario financiero internacional y las negociaciones de un acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y el Mercado Común del Sur (Mercosur).
Abordamos igualmente la agenda del cambio climático y cuestiones conexas que requieren tratamiento urgente en una escala global, subrayó.
La máxima representante del FMI manifestó también su respaldo al ajuste fiscal que el gobierno brasileño prepara para sanear las finanzas y reactivar el crecimiento de la económica.
Al referirse a los programas sociales implementados en Brasil desde hace 12 años saludó las medidas de combate a la pobreza, pero aclaró que se requiere disciplina fiscal para asegurar los recursos de estos planes
Antes del encuentro con la jefa de Estado de Brasil, Lagarde se reunió con el ministro de Hacienda, Joaquim Levy, quien le explicó los proyectos del ejecutivo para superar las dificultades financieras y lograr un superávit primario del 1,2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
La directora del FMI llegó a Brasil para participar en XVII Seminario Anual de Metas para la Inflación, el cual comenzó este jueves en Río de Janeiro, donde visitó varios sitios de interés de esa urbe y la favela Alemao, uno de los suburbios pacificados el año pasado por fuerzas policiales.